"Elcano, su Alteza real, la Princesa de Asturias, a bordo"

Un nuevo capítulo de la historia ‘real’ entre el Juan Sebastián de Elcano y Cádiz empezó a escribirse este miércoles. Con gran expectación mediática, alrededor de 60 medios acreditados, la princesa de Asturias llegó al muelle gaditano para embarcarse por primera vez en el buque escuela de la Armada, el lugar que será su casa durante los próximos cinco meses.

Su presencia dejó las primeras imágenes parecidas a las que ya se sucedieron en la ciudad en 1958, con el crucero iniciado por su abuelo Juan Carlos I, y en 1987, con el de su padre el Rey Felipe VI, que junto a la Reina Leitizia estarán en el muelle gaditano para despedirla y desearle los mejores vientos y mares para la singladura del ya 97 crucero de instrucción de este casi centenario barco.

“Elcano, su Alteza Real, la princesa de Asturias, a bordo”, se escuchaba por la megafonía del buque nada más embarcar, sonando el chifle al subir la escalerilla de entrada pasadas las cuatro de la tarde.

Leonor de Borbón aparecía en el puerto gaditano, a donde está atracado el buque desde ayer, pasadas las cuatro de la tarde y era recibida por el comandante, el capitán de navío Luis Carreras- Presas do Campo tras llegar en coche oficial entre un importante dispositivo de seguridad en los alrededores y algunos curiosos detrás de la valla del muelle intentando no perderse el momento.

La Princesa subía con el protocolo establecido, esperando en popa al resto de sus compañeros, un total de 75 que compartirán aventura con ella desde ya. Luego, junto al resto de guardiamarinas formaron en toldilla, saludando el comandante uno a uno a cada uno de ellos, antes de bajar a la cámara de guardiamarinas y tener el primer encuentro con la hoja de ruta y las primeras instrucciones.

Así fueron los primeros minutos de Leonor de Borbón en el buque escuela, unos instantes donde se le pudo ver charlando animadamente con sus compañeros de promoción de la Escuela naval, donde se ha venido formando en los últimos meses, en su camino por la cubierta del buque hacia su primera reunión de trabajo.

"Un día de gran ilusión"

“Hoy es un día que despierta gran ilusión entre nosotros y entre ellos (los guardiamarinas)”, resumía el comandante a los medios en una jornada donde los periodistas hicieron un recorrido por el buque para “conocer cómo vivimos, trabajamos y dormimos y acercarlo a los ciudadanos ante gran interés” suscitado ante la presencia real. Son ya casi cien años embarcando a guardiamarinas y con la ciudad de Cádiz como protagonista, recordaba el capitán de navío en la cubierta de un buque que se ha sometido a importantes obras para su puesto a punto para este viaje especial en su base de La Carraca en San Fernando.Cocina, enfermería, sollado de suboficiales, mejora de las conexiones con el exterior, lijado, calafateado y barnizado de cubiertas, ... Además, la Armada ha incorporado un maletín de telemedicina de última generación, con la tecnología de Comitas eHealth y conectado directamente al Hospital Central de la Defensa Gómez Ulla (Madrid, permitiendo la atención sanitaria inmediata desde cualquier punto del mundo, asegurando la salud de toda la tripulación.

Estos días, antes de zarpar, los futuros oficiales podrán elegir si dormir en el barco o hacerlo fuera, en unas jornadas donde empezarán a familiarizarse con el trabajo que tendrán para los próximos meses y sus funciones dentro del barco, como las guardias, y también el intenso programa de estudios y clases. Aquí se espera también que empiecen a subirse a los palos del Elcano, una tarea de las más tradicionales e imagen característica.

Pero también, en Cádiz, podrán disfrutar de la ciudad y los guardiamarinas estarán presentes –junto a la Princesa– en actos como el recibimiento en el Ayuntamiento gaditano, en la Iglesia del Carmen de San Fernando con la Patrona de la Armada, o en la de Santo Domingo con la Galeona antes de partir y vivir la emocionante despedida en el puerto de Cádiz, esta vez con presencia de los Reyes de España.

No sabremos si se podrá ver además a la Princesa disfrutando de sus compañeros de la ciudad, como hizo su padre en 1987, saliendo por Cádiz o probando la gastronomía en establecimientos en sus ratos libres antes del inicio de una formación de cinco meses en la mar.

A partir de ahí, este crucero de instrucción les llevará hasta Brasil, Uruguay, Chile, Perú, Panamá, Colombia, República Dominicana y EEUU, hasta su regreso a Cádiz el 21 de julio de 2025.La guardiamarina Borbón hará todo el recorrido, excepto el itinerario de regreso por el Atlántico norte, ya que desembarcará en Nueva York -prevista el 5 de junio- para volar a España, hacer una nueva formación en una fragata de la Armada y reembarcará en el buque escuela en Gijón para hace el trayecto final hasta Marín con su promoción.

Será un tiempo de una experencia única y para toda la vida, como recordada el Rey en la Pascua militar, y en un lugar donde se intenta seguir la tradición marinera, con lo que las tareas no se diferenciarán mucho de las de su padre, “aunque todos los días son diferentes”, comentaban un miembro de la tripulación.