Los estibadores de Cádiz advierten que paralizarán su actividad portuaria durante el Carnaval si la carpa se instala en el Muelle Reina Victoria
Consideran que es "la gota que colma el vaso" en un momento en el que han instalado a la Autoridad Portuaria a mejorar el mantenimiento de su espacio de trabajo
El colectivo demanda reparaciones urgentes y medidas de seguridad para evitar graves accidentes en las instalaciones portuarias
Los estibadores afirman que el Muelle de Cádiz se encuentra en un estado de conservación “deplorable”
Cádiz/La asamblea de estibadores del puerto de Cádiz, donde Coordinadora cuenta con la mayoría sindical, ha decidido que "cesarán las actividades" durante el Carnaval, a finales de febrero y principios de marzo, si la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC) no adopta "medidas urgentes" para solucionar lo que ellos consideran "la crítica situación del tráfico rodado y las condiciones de seguridad en las instalaciones portuarias".
Los estibadores han querido dar el paso adelante con esta advertencia que ya dejaban caer en días pasados a este periódico cuando decidieron dirigir una instancia a Teófila Martínez y al director de la APBC, Agustín Romero, para denunciar la urgente necesidad de una inversión para solucionar el deterioro que padece el firme de varias zonas del recinto portuario que ha llegado ya a provocar incluso accidentes, afortunadamente sin daños personales.
Y han considerado que la decisión adoptada por parte del Ayuntamiento y por parte de la Autoridad Portuaria, que le ha concedido la cesión del suelo necesario tras una reserva llevada a cabo hace unos días desde San Juan de Dios, tras la instalación de una carpa festiva en "pleno recinto de carga", lo que consideran “un total desatino que ya ha colmado el vaso”.
Cabe recordar que, en días pasados, este períódico informaba del documento elaborado por los propios estibadeores y firmado por el delegado de prevención de riesgos laborales Juan Pablo Bermúdez, en el que el colectivo ejxponía con detalle las "deficiencias" que representan un "grave incumplimiento de la normativa de seguridad laboral y que ponen en riesgo la integridad física de trabajadores, usuarios y turistas".
En el documento hacen alusión a un pavimento en "estado deplorable, con fisuras, hundimientos y boquetes que dificultan las maniobras y aumentan el riesgo de vuelcos de remolques y contenedores", algo que ya ocurrió en días pasados precisamente en el Muelle Marqués de Comillas, donde desarrolla su actividad la naviera Armas Trasmediterránea, que cuenta con la concesión estatal que le otorga el serio compromiso de mantener perfectamente surtida a la población de las Islas Canarias de todas las mercancías procedentes de la península.
Tanto es así que se trata de un servicio que no puede parar a no ser por un motivo de extrema necesidad.
Los estibadores, en el citado escrito, también advierten a la APBC de la existencia de rampas que ellos denominan como "peligrosas", con una "falta de mantenimiento que ha llevado al deterioro de las rampas móviles, con hundimientos en los accesos y registros que ceden bajo el peso, representando un riesgo constante".
La "ausencia de señalización" es otra de las deficiencias que se reseñan, pues la falta de marcas viales y una "planificación inadecuada han generado un caos circulatorio, agravado por la llegada de nuevos buques de carga rodada".
Respecto a la mezcla de tráfico, se destaca que "vehículos pesados, ligeros, autobuses turísticos y peatones comparten las mismas zonas, lo que aumenta el riesgo de colisiones y atropellos".
Se recoge en el escrito que ya se han registrado incidentes, como accidentes de vuelcos, debido a la "imposibilidad de cumplir con la normativa en el traslado de contenedores remontados por el pésimo estado del pavimento".
Una situación que la organización comunicó por escrito a la APBC el pasado 12 de enero. Se da la circunstancia de que los estibadores admiten que ya existió un escrito similar en abril de 2024, "sin que éste haya surtido efectos", lo que les ha llevado a tomar la firme decisión, aunque aún evitable, de paralizar su actividad en los días de Carnaval, algo que supondría un grave problema para el tráfico de mercancías en dirección a Canarias.
Y eso sin dejar de lado la importancia que está adquiriendo Armas Trasmediterránea en lo que se refiere al tráfico de pasajeros, tal y como demostraba en días pasados la propia Autoridad Portuaria, presidida por la ex alcaldesa Teófila Martínez.
De hecho el transporte de personas entre la península y las ínsulas ha vivido en los últimos meses un tirón importante con un crecimiento de un 50% que podría seguir aumentando si Armas sigue apostando de manera tan firme por quedarse con este tipo de tráficos poniendo a merced de estos clientes los mejores buques de su flota, dotados de infraestructuras cómodas pensadas para el ocio y disfrute de aquellos que apuesten por llegar a Canarias sin necesidad de contar con el avión como medio de transporte. A estos, sin olvidar siempre de que hay personas que son aiún incapaces de montarse en un avión por miedo a volar, se suman aquellos ciudadanos que prefieren viajar con sus vehículos a bordo o incluso con sus caravanas para, una vez llegar a Canarias, poder moverse libremente y poder disfrutar de todo lo que ofrece este territorio español.
Reparaciones inmediatas
Y volviendo al conflicto planteado por los estibadores, en su último escrito exigen "reparaciones inmediatas del pavimento y las rampas móviles; la implementación de señalización clara y separación física entre diferentes tipos de tráfico; un plan exhaustivo para la recepción segura de buques de carga rodada, así como inspecciones de seguridad periódicas y formación en seguridad vial".
“Confiamos en su colaboración (en clara alusión a la APBC) para mantener un entorno laboral seguro, pero nos reservamos el derecho a paralizar cualquier actividad que ponga en riesgo la integridad física de los trabajadores o usuarios, en caso de que las condiciones de seguridad no sean las adecuadas”, se advierte en el documento, algo que han optado por convertir en realidad o, al menos, avisar de que se calibra con seriedad esta posibilidad de paralizar la actividad de los estibadores. Y recordar que sin la intervención de los estibadores se hace del todo imposible que zarpen los buques de Armas Trasmediterránea, al menos con mercancía a bordo en forma de contenedor o en forma de remolque.
Armas Trasmediterránea no se ha manifestado aún respecto a esta advertencia hecha pública por los portuarios, aunque es obvio que tratará de mediar en todo este conflicto a sabienda de los daños y las consecuencias que supondría para la actividad portuaria en general el cese de la actividad de los estibadores.
Los trabajadores hacen así un llamamiento a la APBC para que "asuma su responsabilidad y actúe con celeridad, evitando así una paralización que tendría un impacto significativo en las operaciones del puerto y en la economía local".
Los estibadores no han dejado del todo claro si exigen que la carpa de Carnaval no se instale en el Muelle Reina Victoria, aunque cierto es que han indicado a este periódico desde el sindicato Coordinadora que esta acción en la que mucho tienen que decir Ayuntamiento y Autoridar Portuaria ha empeorado la situación y ha constituido en "la gota que ha colmado el vaso" y que podría suponer el inicio de un grave conflicto al que se podrían unir otros sectores de la comunidad portuaria que ya han indicado a este periódico, sin hacerlo de manera pública aún, que están del todo de acuerdo en las reivindicaciones de los estibadores que sí han decidido dar el paso en firme para evitar males mayores.
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