Dos hosteleros gaditanos pugnan por reabrir el quiosco de la Avenida de la Bahía

La resurrección hostelera del paseo marítimo de la Avenida de la Bahía seguirá teniendo aires gaditanos. El proceso puesto en marcha por el Ayuntamiento para reabrir por fin el quiosco situado a escasos metros del nuevo puente y del club Viento de Levante se debate ahora entre dos conocidas empresas del sector en Cádiz que pugnan por gestionar el nuevo negocio durante la próxima década.

En concreto, el Ayuntamiento estudia en la actualidad las dos ofertas recibidas en el concurso público. La primera lleva la firma de José Manuel Gómez de la Vega, propietario del conocido negocio La tapería de Lulu ubicado en la confluencia de la Avenida principal con la calle Doctor Herrera Quevedo. Un espacio muy concurrido que se ha convertido en uno de los referentes para tapear por esa zona de extramuros y de la playa Victoria. Gómez de la Vega tiene un segundo local de hostelería en Puerto Real.

La otra empresa que ha formalizado oferta para este quiosco de la Avenida de la Bahía es Silvia Rincón Gaditano, que son los gerentes de El rincón de Silvia en el Club Náutico Alcázar y que gestionan también el negocio Mamá Margarita en la calle Pintor Godoy, en el barrio de La Laguna. Esta pareja de hosteleros formada por Silvia Llamas y Germán Lloret regentaron en su día el Mesón de los Apóstoles, participando también en la reapertura de La Carbonera de la calle San Fernando.

Con estos precedentes conocidos de una y otra firma, la delegación de Patrimonio del Ayuntamiento estudia ahora la documentación aportada respecto al proyecto que pretenden desarrollar en el quiosco; informe que se elaborará antes de la apertura de la oferta económica que una y otra empresa de hostelería ha presentado al concurso.

En este sentido, conviene recordar que en las bases de la convocatoria se establecía un canon mínimo anual de 18.048 euros, lo que equivale a una renta mensual de 1.504 euros por un período de diez años.

A la espera de adjudicar la explotación del quiosco a una u otra empresa de hostelería, se da por sentado que en los próximos meses reabrirá al público este establecimiento que fue una de las grandes apuestas del Ayuntamiento para revitalizar este paseo marítimo y esa zona de la Barriada de la Paz pero que no ha terminado de cuajar. Tras su apertura en el año 2011, de manos de la empresa de hostelería Baro (ya ausente en la ciudad tras el cierre progresivo de los distintos negocios que tenía, el más significativo en los bajos de Tiempo Libre), el Ayuntamiento llevaba desde el año 2018 reclamando la entrega de las llaves ante el estado de abandono que presentaba el establecimiento.

Actualización de la explotación a terceros de equipamientos municipales

Esta tramitación que está actualmente en curso se une, además, al proceso de actualización de las explotaciones por parte de terceros de diferentes equipamientos de titularidad pública, en la mayoría de los casos vinculado al sector hostelero. Así ha ocurrido con uno de los quioscos de la Avenida de la Sanidad Pública, con el Baluarte de los Mártires (que sigue en manos de Catering El Faro por otros diez años), o anteriormente con el quiosco de la Alameda. Y así va a ocurrir con otros tres quioscos que el Ayuntamiento va a reparar y poner a punto para sacar a concurso su explotación; se trata, en concreto, de la antigua cuchillería de la Plaza de la Libertad, del quiosco situado en la esquina de la Plaza de Candelaria más próxima a Montañés, o del que está situado en San Juan de Dios próximo a Sopranis.

A todo ello se une también la licitación que se está tramitando para la explotación de la Torre Tavira (con dos empresas interesadas); y los procesos pendientes de culminar determinados trámites y problemas burocráticos para salir a concurso público, como son el del establecimiento situado frente al actual Rectorado de la UCA (La Canela se llamó mientras estuvo abierto) o el del quiosco situado en el interior de los antiguos Cuarteles de Varela (Lumen).