La apertura de nuevos hoteles en Cádiz apenas rebaja el precio del alojamiento en la ciudad
En un año la capital ha incrementado en un 25% sus plazas hoteleras, mientras que el coste de las mismas apenas ha bajado un 3%
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La buena ocupación hotelera con la que la ciudad de Cádiz cerró el mes de julio, que se espera superar en el recién terminado agosto, pendiente de las estadísticas oficiales, contrasta con el coste medio de una habitación en la capital de la provincia, siempre elevado.
No es la primera vez que se destaca el elevado coste de las habitaciones en la ciudad, que nos sitúa entre las más caras del país. Sin embargo, hasta ahora Cádiz había sufrido un importante déficit de plazas hoteleras, con una ausencia de equipamientos más que notable. En los últimos años se ha dado la vuelta a esta situación hasta el punto que si en julio de 2022 la ciudad contaba con 2.894 plazas hoteleras, este año se han llegado ya a las 3.652 camas. Ni más ni menos que un 25% más en apenas doce meses.
La ley del mercado es muy clara: si hay más demanda que oferta, los precios suben, pero si la oferta crece y la demanda se mantiene, éstos deberían de bajar y más si ya están sobrevalorados.
El más que importante incremento en la oferta de alojamientos hoteleros en Cádiz producido este año, más lo ya existente en otras modalidades turísticas, sí ha afectado a los precios este verano, pero no en la cantidad que se podía suponer.
El coste medio de una habitación ha bajado en el mes de julio, el último aportado por el INE, pero no lo suficiente como para que Cádiz salga del listado de las ciudades turísticas más caras.
En el mes de julio el precio medio de una habitación doble en los hoteles de Cádiz se situó en 143,33 euros. Un 3,10% menos que el año anterior, en un periodo de tiempo en el que el conjunto nacional se incrementó un 6,17%.
Si lo comparamos con el mes de junio (durante el cual los hoteles de Cádiz acogieron incluso a más clientes que en julio), creció en 32 euros el precio de la habitación, cuando el año pasado el aumento fue de 26 euros.
Este precio está incluso por encima de referentes turísticos como Málaga, y, en pleno verano, muy por encima de Sevilla, Córdoba o Granada. El INE aporta datos de 105 puntos turísticos de toda España. Cádiz estaba en el puesto 12 entre los precios más caros en cuanto al alojamiento hotelero.
Habrá que ver cómo ha evolucionado el mes de agosto, donde el aumento de turistas ha sido evidente en la ciudad. El año pasado el precio de la habitación subió hasta los 170,10 euros.
Líder entre los paradores
Este diario realizó a mediados del pasado mes de agosto un análisis de los precios de las habitaciones de los hoteles de la ciudad, teniendo en cuenta la información aportada en sus propias páginas web. El Hotel Atlántico era, y siempre lo ha sido, el más caro, con un precio de 378 euros la noche analizada.
Esta cifra, según la web de la Red de Paradores del Estado, situaba al hotel gaditano entre los tres más caros de los cerca de cien establecimientos de esta cadena pública, lo que no ha impedido alcanzar cifras muy elevadas de ocupación, gracias a la calidad de sus instalaciones.
Varios de los hoteles privados de la ciudad ofrecían habitaciones estándar, a mediados de agosto, por encima de los 250 euros la noche, entre ellos varios de los alojamientos más recientes. Otros abiertos hace pocos meses y también con instalaciones muy elogiadas, oscilaban entre los 200 y 240 euros.
En ese momento del mes era posible conseguir habitaciones más baratas en grandes hoteles de Málaga o Chiclana, el gran referente del turismo en la provincia.
Eran pocos en los que se podía dormir por menos de 200 euros y apenas media docena estaban por debajo de los 150 euros, entre ellos varios de los alojamientos más históricos de la ciudad.
Asumiendo la subida de precios por el aumento del IPC y la influencia negativa de la guerra en Ucrania, incremento que ha afectado al sector en todas partes y no solo en Cádiz, lo cierto es que aún hay hoteles en la ciudad que deberían de ajustar más sus precios. Tal vez con ello lograrían poner el cartel de completo durante toda la temporada estival y, sobre todo, aumentar su clientela el resto del año.
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