Locales comerciales y edificios de oficinas podrán convertirse en viviendas en Cádiz

El gobierno de Bruno García anuncia una tercera medida para ampliar las posibilidades de suelo residencial en la ciudad, después de iniciar los procesos de modificación del PGOU para prohibir nuevas viviendas turísticas y para eliminar también la compatibilidad de suelo residencial con hoteles y apartamentos turísticos

Un local cerrado en Santa María, donde los vecinos reclaman más viviendas en estas tiendas vacías.
Un local cerrado. / Julio González

El gobierno de Bruno García sigue intensificando el trabajo y las medidas para favorecer al máximo posible la vivienda en Cádiz. De este modo, en menos de una semana ha anunciado tres medidas de calado que buscan blindar y fomentar el uso residencial por encima de otras actividades que hasta ahora eran compatibles o incluso prioritarias. Y en esta línea, la última medida anunciada este martes por el Ayuntamiento es una doble actuación que permitirá habilitar viviendas donde ahora no es posible.

En este sentido, la primera línea de actuación va dirigida a permitir que los locales comerciales de planta baja de edificios se puedan convertir en pisos. Una posibilidad que hasta ahora niega el PGOU y que el PP quiere cambiar.

Según explica el concejal de Urbanismo, José Manuel Cossi, el PGOU de 1995 "establecía un listado de calles donde se prohibía la implantación de usos residenciales en la planta baja”; algo que mantuvo el actual PGOU, que se limitó "a terminar de mallar dicho trazado”. "El objetivo que buscaba era consolidar y potenciar la implantación de actividad económica en los locales situados en las plantas bajas en estas calles del casco histórico. Por ello, la ordenanza actual limita la implantación de los usos residenciales en los locales de planta baja en favor de otros que generen actividad económica, en este caso los comerciales y terciarios”, sigue explicando Cossi.

Frente a esta intención de la ordenación urbanística, actualmente se detecta que muchas de esas calles con uso comercial protegido "no han conseguido potenciar la actividad económica pretendida”, algo que lleva a concluir al responsable de Urbanismo que con el paso de los años "el resultado de la aplicación de dicha ordenanza está dando un resultado contrario al pretendido". Y es que "en aquellas calles que tienen una clara vocación económica se ha mantenido esta actividad, pero en otras muchas está dando lugar a locales con muy reducidas dimensiones que ocupan la planta baja de la fachada y que, en muchos casos, permanecen cerrados o, en su defecto, utilizados como trasteros".

Por eso, la nueva medida que anuncia el gobierno local es "reducir el ámbito de aplicación de esta ordenanza, que actualmente afecta a 50 calles o tramos de las mismas, limitándose los ejes comerciales exclusivamente a aquellas vías con una vocación histórica clara de actividad económica". Una medida que permitirá "destinar a uso residencial esos locales de la planta baja" que no tengan actividad comercial, "con lo que damos a la ciudad una herramienta más para conseguir todas las viviendas posibles”.

Precisa Cossi que la medida que se va a llevar a cabo no implica que todos esos locales se tengan que transformar en vivienda obligatoriamente, sino que lo que hace es "añadir la posibilidad de que sea destinada también a vivienda”.

Viviendas compatibles en usos terciarios

La otra medida anunciada por el Ayuntamiento en favor de la vivienda es la de permitir la compatibilidad del uso residencial en las parcelas calificadas con usos de servicios terciarios (oficinas y servicios de comercialización). Algo que en la actualidad no permite el PGOU.

Efectivamente, en el escenario actual en suelos terciarios solo son admisibles usos industriales y comerciales en convivencia con el uso terciario principal del edificio. Una limitación que impide implantar usos residenciales destinados a viviendas en actuaciones parciales; es decir, que no se puede destinar a viviendas una planta o parte de una planta de ese edificio calificado con uso terciario.

De ahí la nueva modificación del PGOU que empezará a tramitar el Ayuntamiento y que busca, tal y como explica José Manuel Cossi, "permitir el uso residencial como compatible del terciario". "Así, en un edificio destinado a oficinas se podrá albergar puntualmente y en determinadas condiciones viviendas en algunas de sus plantas", añade el concejal, que explica que en la actualidad hay 30 fincas calificadas con uso terciario en el casco histórico y otra docena de edificios en extramuros.

Más medidas

Estas actuaciones que viene anunciando el gobierno local se suma, según recuerda el propio Ayuntamiento, al plan de reforma interior de las viviendas municipales que en el próximo consejo de administración de Procasa está previsto que se aborde para adjudicar el contrato para llevar a cabo los proyectos técnicos de las 160 actuaciones previstas.

"Esto viene unido también a la construcción de nuevas viviendas, para lo cual ya se cuenta con financiación para acometer las primeras 106 que se iniciarán este año. De hecho, en el día de mañana miércoles se va a proceder a la puesta de la primera piedra de las primeras 53 viviendas de alquiler social en la avenida de Marconi", recuerdan desde el Ayuntamiento gaditano.

stats