Marqués de Casa Recaño, un genovés que se hizo gaditano

Bernardo Recaño Muzio construyó su palacio en el punto más alto de la ciudad

Financió la Capilla de los Genoveses del Oratorio de San Felipe Neri, elaborada en mármol

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Fachada del palacio del marqués de Casa Recaño, construido entre 1720 y 1723, que albergaba una gran colección de pinturas.
Fachada del palacio del marqués de Casa Recaño, construido entre 1720 y 1723, que albergaba una gran colección de pinturas. / D. C.

Cádiz/En esta página recorremos la biografía de Bernardo Recaño Muzio, primer marqués de Casa Recaño, que dejo su huella en Cádiz.

Bernardo nació en Génova sobre 1670, en una familia de poderosos genoveses, grandes terratenientes dedicados al comercio. Tenían una gran red comercial con América desde el siglo XVII y muchos de los miembros de la familia se dedicaron a la política y algunos fueron concejales.

En 1687, según los documentos, llega a Cádiz y se va a vivir a casa de un familiar para ampliar su red comercial. Empieza a prosperar y en 1701 se establece por libre y se dedica a importar telas de Génova y América y de allí trae algunos de sus nuevos productos, como el chocolate.

En 1723 Felipe V le concedió el título de marqués de Casa Recaño. En 1719 fallece su hermano Luis y entonces Bernardo comienza una carrera meteórica y compra varias casas en Cádiz con el propósito de arrendarlas para tener beneficios, actividad muy común de los comerciantes de la época.

En 1720 manda a construir el edificio que hoy conocemos como la Torre Tavira. El solar pertenecía a un antiguo horno que sufrió un incendio y entonces aprovecha y compra el solar para construir su casa principal en un lugar estratégico, pues era la zona mas elevada geográficamente de la ciudad.

Una foto de época del VII marqués  de Casa Recaño, Miguel Ángel Liaño, con su mujer, Ana Pacheco. y alguno de sus 12 hijos. Entre ellos están Miguel Ángel (VIIImarqués de Casa Recaño), Lourdes, Ana María, Joaquín, Jesús, Pedro, Francisco, Juan, María de la Paz y María Dolores.
Una foto de época del VII marqués de Casa Recaño, Miguel Ángel Liaño, con su mujer, Ana Pacheco. y alguno de sus 12 hijos. Entre ellos están Miguel Ángel (VIIImarqués de Casa Recaño), Lourdes, Ana María, Joaquín, Jesús, Pedro, Francisco, Juan, María de la Paz y María Dolores. / Archivo familiar

En 1723 finaliza la casa cuya portada lucía el escudo familiar del marquesado de Casa Recaño. Fue un gran coleccionista y consiguió reunir más de 500 pinturas de artistas como Tiziano, Murillo o Clemente de Torres. Su arquitectura es el ejemplo de la típica casa de cargadores a Indias, con su torre vigía. También financió la Capilla de los Genoveses del Oratorio de San Felipe Neri y ayudó a los padres filipenses. En agradecimiento al marqués por su contribución, los filipenses le cedieron una de las tribunas del altar mayor para asistir a la misa.

En 1730 entra en una quiebra absoluta y sobre 1735 la casa acaba en un concurso de acreedores con todas sus propiedades. El marqués de Casa Recaño se traslada a vivir en San Fernando y muere en 1750.

La Capilla de los Genoveses del Oratorio de San Felipe Neri la vende a Sebastián Sandro Franco, conde de las Cinco Torres, el cual, esta enterrado en dicha capilla.

En 1723, el marqués de Casa Recaño mandó construir y financió la Capilla de los genoveses del Oratorio de San Felipe Neri.
En 1723, el marqués de Casa Recaño mandó construir y financió la Capilla de los genoveses del Oratorio de San Felipe Neri. / D. C.

En 1778, la torre de la casa se convirtió en torre vigía oficial del puerto de Cádiz, siendo su primer vigía Antonio Tavira. La casa palacio del marqués de Casa Recaño, después fue la primera sede del Tribunal Supremo de España y posteriormente estuvo la Escuela de Nobles Artes de Cádiz. También estuvo la Escuela Normal de Magisterio, estableciéndose luego las Hermanas de la Caridad, que regentaron el conocido como Colegio de la Torre Tavira.

En su última etapa, tras una remodelación, se adaptó el edificio para acoger el Conservatorio de Música Manuel de Falla. Actualmente allí se ubica el Museo del Carnaval, conservando el barroco de su origen tanto en su fachada como en su patio y muchos de sus elementos interiores. Y en su torre vigía, desde 1994, la Cámara Oscura, uno de los mayores atractivos para los turistas que visitan la ciudad.

Agradecimiento por la colaboración en el texto al historiador Carlos Maura, que próximamente presentará una publicación sobre la figura del marqués de Casa Recaño. Y agradecimiento por las fotografías a los descendientes del marqués de Casa Recaño; Mary Liaño y a la actual marquesa de Casa Recaño, Sylvia Liaño y Ortiz.

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