La nueva cúpula de Zornoza ya ejerce sus cargos
Óscar González y Carmen Lobato han tomado este martes posesión como nuevos vicario general y ecónoma de la diócesis
La nueva cúpula del obispo de Cádiz, Rafael Zornoza, ya está ejerciendo sus cargos. En el patio de Hospital de Mujeres y ante medio centenar de personas han tomado hoy posesión el nuevo vicario general, Óscar González, y la nueva ecónoma diocesana, Carmen Lobato. Ellos serán las principales personas de confianza del obispo, relevando a Fernando Campos en la Vicaría General y a Antonio Diufaín al frente de las cuentas.
Sobre el nuevo vicario general, Zornoza ha destacado el conocimiento que tiene de "la Diócesis, el Obispado, el Seminario, la vida pastoral, los movimientos laicales, la universidad, y, por descontado, de tus hermanos sacerdotes”, por lo que confía que aporte "con tu ejemplo, buen criterio y presencia un impulso mayor a la comunión, a la fraternidad y a la lealtad”. Y le ha recordado especialmente, a él y a todo el clero, que “la Curia no es un instrumento meramente burocrático para realizar trámites administrativos, sino un servicio pastoral. Por todo ello, el trabajo que realizáis aquí debe ser esmerado y exigente porque está en juego la eficacia de la Iglesia en el cumplimiento de tal misión”.
Con la nueva ecónoma, la primera persona laica que accede a esta responsabilidad diocesana, se inicia -según ha destacado Zornoza- "una nueva etapa que está preparada por los logros anteriores, los asuntos en vías de solución y, también, lamentablemente, por la nueva crisis que avanza como consecuencia de la Covid-19”. “Contamos contigo en este delicado servicio que, además de administrar con rigor, ha de ayudarnos a entender la economía como un ámbito de pastoral al servicio de la evangelización y de los necesitados, y para desarrollar la responsabilidad de compartir solidariamente el cuidado de la Iglesia y su fin misionero”, le ha trasladado también el obispo a Lobato.
Tanto el vicario general como la ecónoma asumen su responsabilidad con conciencia de la importancia de estos cargos. Óscar González ha confesado en su toma de posesión que pide cuatro virtudes en el desempeño de su labor: “Humildad, caridad, lealtad al Obispo y generosidad y prudencia a la hora de desempeñar esta tarea. Soy muy consciente de que sólo desde el respeto, la obediencia y la colaboración leal con el Obispo se sirve a Cristo y a la Iglesia”. Y Carmen Lobato se ha mostrado sabedora de que "de la tarea económica depende el sostenimiento de la Iglesia, de sus parroquias, sacerdotes, labores caritativas y el patrimonio”.
Los sustituidos
Rafael Zornoza ha querido también tener unas palabras de despedida a Fernando Campos y Antonio Diufaín. Al ya ex vicario general le ha transmitido su certeza “de que fue un acierto que aceptases desempeñar este cargo unido a mi persona con especial confianza y comunión”. Campos se dedicará ahora en exclusiva a la Vicaría de Pastoral, para lo cual le ha encomendado el obispo “un impulso pastoral que debes motivar y acrecentar el fomentar el nuevo ardor misionero, los nuevos métodos pastorales y ofrecer las experiencias de una vida eclesial en comunión”.
Sobre Diufaín ha reconocido la entrega estos últimos ocho años (desde su llegada como obispo) en una labor tan compleja como ha sido “la modernización de los protocolos exigidos hoy por las administraciones del Estado y por la Conferencia Episcopal Española, lo cual supone un profundo cambio de mentalidad que ha de llegar a todas las parroquias, delegaciones, asociaciones, cofradías...". "Cosa difícil y que necesita tiempo", ha añadido Zornoza en referencia a los diferentes cuestionamientos, polémicas y protestas públicas que el proceder económico del Obispado ha tenido en estos últimos años.
Temas relacionados
5 Comentarios