15 peñas que cerraron sus puertas en Cádiz (y muchas más)

Los cambios en los hábitos de ocio y la falta de relevo generacional fueron la clave para que, a partir de los 90, las peñas de la capital gaditana fueran cerrando una a una hasta quedarse ahora en poco más de una decena. Hubo un tiempo, a finales de los 70, cuando se creó la Federación Provincial de Peñas Gaditanas, que Cádiz contaba con alrededor de 60. Recordemos algunas de las peñas que ya no existen y que contaron con destacada actividad en las fiestas de la ciudad, la mayoría de signo carnavalesco.

El Molondro

Llevaba el nombre de un célebre chirigotero llamado Enrique Gómez y se fundó en 1977 en la calle Cristo de la Misericordia, en La Viña. Era conocida por los retratos de carnavaleros que adornaban sus paredes, realizados por Juan Muñoz. Posteriormente se trasladó a la calle La Palma, donde cerró sus puertas hace unos años.

El Erizo

También en la calle Cristo de la Misericordia, en el número 8. Se creó en 1980 y en 1981 la peña organizó la primera Erizada Popular en La Viña, que permanece en nuestros días organizada por la Federación de Peñas y Entidades Caleteras, pues El Erizo cerró en 2013. En su lugar se construyeron pisos turísticos.

La amistad

Se ubicaba en el barrio de Loreto y la fundaron en 1979 un grupo de vecinos de lo que hoy es el bloque del número 55 de la avenida de la Sanidad Pública y entonces era, antes del soterramiento, avenida Alcalde Manuel de la Pinta, en los populares ‘pisos pijamas’. Durante más de 30 años celebró en verano un reconocido concurso de coplas antiguas. La falta de recursos humanos para mantenerla abierta provocó su cierre a finales de 2018.

Los 14 resultados

La idea de abrir esta peña a finales de los 70 surgió en una cena de siete matrimonios en El Chato. La entidad nació en la Cuesta de Jabonería, en el barrio de Santa María. Enseguida se significó por llevar al Falla muy buenas chirigotas, siendo la primera ‘El padre Abraham y sus pitufos’ en 1981. Luego llegó varias veces a la final con agrupaciones como ‘Los concertistas desconcertados’ (1984), ‘Los brutos secos’ (1985) o ‘Cada uno con la suya’ (1986). La peña cerró en los años 90.

La Gaviota

Amigos comerciantes del entorno de la plaza idearon, en una reunión en el bar Merodio, la creación de esta peña, que se gestó en 1980 y se inauguró el 14 de febrero de 1981 en la calle Barrocal. Convertida más tarde en Asociación Cultural, se significó por realizar eventos como el premio carnavalesco José María Pemán, creado en 1982. También instauró los premios Corazones de Oro, que se entregaban con motivo del Día de San Valentín (precisamente el día en el que se inauguró la peña). Francis Quintanilla fue uno de sus fundadores y presidente durante muchos años.

Los Pitirolos

No hace mucho que cerró esta peña en la calle particular Julio Rico de Sanz, de la zona de Lacave. Llevaba el nombre de la chirigota ganadora en el Falla en 1972, original de El Chimenea y Antonio Torres. Tuvo una destacada actividad carnavalesca con la celebración, cada febrero, del premio Cala de coplas carnavalescas y de la Galerada Popular.

El Charpa

Llevaba el apodo de un célebre comparsista, Antonio Pérez Campos, componente de grandes agrupaciones y director en 1965 de 'Los escarabajos trillizos', que para España entera se convertirían en 'Los Beatles de Cádiz'. En mayo de 2012 reabrió sus puertas como peña El Charpa-Amigos del Tango, que presidida por Alfonso Sánchez del Pino servía de sede estable del coro callejero de Kiko Zamora. Actualmente es un negocio hostelero, aunque en la fachada se ha respetado el rótulo original de la entidad.

El Molino

La peña, ubicada en la calle Adolfo de Castro, en el barrio de El Mentidero, perdió su sede a finales del verano de 2004 por un desacuerdo con la propiedad de la finca. Aunque sin local, continuó su actividad celebrando la Ostionada Popular que creó en 1987 y que se celebró los primeros cinco años en la plaza de La Oca, junto a la sede. En 1992, la celebración gastronómica previa al Concurso de Agrupaciones se trasladó a la plaza de San Antonio. En 2018 los pocos peñistas que quedaban celebraron la última Ostionada y meses después El Molino dejó de existir. La fiesta de los ostiones sigue vigente, organizada por el Aula de Cultura del Carnaval. Donde estuvo El Molino hay ahora una frutería, aunque como ocurre con El Charpa aún puede leerse el rótulo en la fachada.

Los Juancojones

Abierta en la calle General Morla a finales de los 90, en el barrio de El Mentidero, por la chirigota del Love en honor a la agrupación que sacaron en 1998 y fue primer premio. Cerró en el verano de 2020 “por causas ajenas a nosotros y por desavenencias con el propietario del local”, según anunciaba en redes sociales la chirigota. Durante su apertura fueron muchas las agrupaciones que allí se vistieron y maquillaron para cantar en el COAC, debido a su cercanía con el Teatro Falla.

La pijota

Tenía su sede en el Campo del Sur y cerró en otoño del año 2000 por problemas financieros. Había sido fundada en 1976.

Alameda

Estaba en la calle Vea Murguía, barrio de El Mentidero. Celebraba antes del Carnaval una Erizada Popular y era muy activa en la organización de ensayos generales. Su lugar lo ocupa hoy día la Taberna Romero.

Andújar

En la calle Teniente Andújar, barrio de Santa María. Celebró jornadas culturales y en Carnaval, en la plaza de la Merced, la fiesta gastronómica de las Papitas Aliñás.

Agustín ‘Chimenea’

Enclavada en la plaza Gaspar del Pino. Llevaba el nombre del célebre autor Agustín González ‘Chimenea’. Antes de su cierre en 2004 celebraba un concurso de coplas para agrupaciones infantiles y juveniles.

El Quini

Se encontraba en La Viña, en la confluencia de las calles San Félix y Pericón de Cádiz. Celebró durante muchos veranos un concurso de coplas antiguas que fue referencia para los grupos y que ahora mantiene el Aula de Cultura del Carnaval de Cádiz, colectivo que tuvo su sede en esta peña durante unos años.

Macías Retes

Daba nombre al célebre director de coros, de nombre José, y se ubicaba en la calle Pericón de Cádiz, en La Viña. También celebraba un prestigioso concurso de coplas. Cerró alrededor de 2009 y luego reabrió, con el autor José Mari Barranco ‘El lacio’ al frente, en verano de 2014. Al cabo de un tiempo, también desapareció.

Dos peñas sin sede pero que aún resisten

La tertulia de Doña Frasquita

La peña creada por los componentes del grupo mixto de Adela del Moral bajo el nombre del coro que sacaron en 1983 se inauguró en junio de 1985 en la calle Santiago, aunque se constituyó como entidad el año antes. El elevado coste del alquiler obligó al cierre en la primavera de 2006. La Tertulia de Doña Frasquita se significó por realizar diversas actividades como su Semana Cultural, en la que entregaba sus premios ‘Age’ y ‘Malage’. Actualmente, aunque sin local, sus socios siguen celebrando actos y mantienen la Gambada Popular en la peña La Perla y la entrega del premio Cajonazo, que instituyó en 1986 tras la polémica con la chirigota ‘Los cubatas’. Desde hace muchos años en el local de esta peña funciona un gimnasio.

La Salle Viña

La señera entidad ha tenido que abandonar recientemente su sede por desacuerdos con la dirección del colegio lasaliano donde estuvo desde su fundación en 1978 tras el primer coro de su exitosa trayectoria: ‘Los liberales de 1800’. Ese mismo año, en septiembre, comenzó a celebrar lo que fue durante años una cita ineludible del verano gaditano: la Semana Cultural. Este evento se canceló en 2020 a causa de la pandemia y no se ha vuelto a recuperar. La peña continúa existiendo -este año ha sacado el coro juvenil ganador del COAC, ‘La pecera’- pero sin sede física.

Otras peñas que cerraron

En el recuerdo quedaron otras peñas que cesaron su actividad como la peña El Carrete en la calle Arbolí, La lechuga en El Pópulo, El maletilla en la plaza de la Catedral, Los comilones en Teniente Andújar, Los de siempre en Fernán Caballero, La Tía Norica en Vea Murguía, La mascarada en Cervantes, La caña del país en Enrique de las Marinas, 1800 en la calle La Palma, Bahía de Cádiz en la calle Cooperativa, la peña El Lete en la calle Botica o Camarón de la Isla en la calle Paraguay.