La primera piedra en Matadero. Un acto muy popular

El PP de Cádiz vuelve a sonreír, vuelve a experimentar los nervios y las tensiones de la organización de un acto de ciudad y en la ciudad, vuelve a liderar una iniciativa que se ejecuta. La colocación de la primera piedra de la construcción de las 60 viviendas correspondientes a la segunda fase de Matadero ha recordado este lunes al Partido Popular que gobernaba la ciudad con Teófila Martínez al frente. No en vano, han coincidido muchos rostros conocidos de la política municipal reciente. Empezando por Ignacio Romaní, maestro de ceremonias como responsable de la Agencia Pública de Vivienda de Andalucía (Avra) en la provincia. También ha estado Bruno García, que acudió en calidad de parlamentario autonómico; Mercedes Colombo, ahora delegada territorial de Fomento; o Juancho Ortiz, hoy líder de un grupo municipal que también ha estado presente casi al completo en la cita. Hasta el exconcejal Jesús Tey se ha acercado a saludar a sus antiguos compañeros.

Junto a estas caras conocidas del PP gaditano ha acudido también a Matadero parte de la cúpula autonómica del partido. Empezando por el presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno Bonilla, que estrenaba encuestas favorables que le otorgan casi la mayoría absoluta en Andalucía. También ha venido la consejera de Vivienda, Marifrán Carazo, o la delegada del gobierno andaluz en la provincia, Ana Mestre.

La importancia que para el PP tenía el acto de hoy lo reflejaba su preparación. Una carpa de considerables dimensiones habilitada a pie de obra, suelo enmoquetado (de azul pepero), atril, sillas revestidas con tela, sonido profesional, letreros de la Junta de Andalucía, trajes oscuros y corbata en el protocolo establecido. Los populares han cuidado hasta el último detalle de un acto institucional previo a la simbólica colocación de la primera piedra.

El único contrapunto a esta popular celebración lo ha puesto el alcalde de Cádiz, José María González, que se ha mostrado muy cordial tanto con el presidente andaluz como con la consejera, e incluso con Romaní. Un alcalde que, eso sí, no aplaudió la intervención de Moreno Bonilla pero sí el buen manejo de la pala que se dio el presidente para sellar esa urna introducida en el solar con periódicos del día, un CD con el proyecto y un ejemplar del estatuto de autonomía.

González ha acudido al acto solo. A diferencia del día en que se presentó la licitación de Matadero, no acudió al inicio de la obra la concejala de Vivienda, Eva Tubío (lo cual fue llamativo teniendo en cuenta la reciente resolución judicial del polémico trámite de concesión de viviendas de la primera fase de esta promoción, que ha quedado archivado), ni tampoco lo hizo el responsable de Urbanismo, Martín Vila, que se han perdido esas sensaciones que el PP no vivía en Cádiz desde 2015.