Recuperando el tiempo con la familia
20 vivencias del 20
Rafa Velázquez, director de la comparsa de Martínez Ares, cuenta la experiencia de una agrupación con numerosos aplazamientos de actuaciones por el Covid
El domingo 8 de marzo, día del Carnaval Chiquito, las agrupaciones gaditanas realizaban sus últimas actuaciones. Pocos días después aparecían la epidemia, el estado de alarma y el confinamiento. Luego, a duras penas han podido cantar en sitios y fechas contadas. Para una comparsa como la de Martínez Ares, acostumbrada a actuar durante todo el año, ha sido “bastante complicado”, como reconoce su director, Rafa Velázquez. “Teníamos como es habitual un año completo de actuaciones y nos hemos visto obligados a suspender algunas y muchas de ellas aplazarlas para 2021. Aun dando la opción de devolver el dinero a los espectadores, se han mantenido para el año que viene. Eso es una satisfacción enorme por el apoyo que recibimos de los aficionados”, dice el comparsista.
Cuenta Velázquez que tantas cancelaciones “han supuesto un varapalo. Acabamos el 8 de marzo en Madrid y ya no cantamos hasta verano, con dos o tres actuaciones, y hace poco en Madrid de nuevo. A la hora de contratar un teatro no se han bajado los precios en consonancia con la reducción de aforo, y así es muy difícil. Nos costaba lo mismo un teatro con 200 localidades que uno con 1.000”. Según el director de ‘La chusma selecta’ “era imposible hacerlas con tanto miedo y restricciones sanitarias. Y las medidas, por otro lado, no creo que hayan apoyado mucho a la cultura”. Al menos, ya que ha perdido un buen dinero, la comparsa “tiene la suerte de que la mayoría de los componentes tenemos nuestros trabajos aparte del Carnaval, aunque algunos nos hemos visto afectados por ertes o despidos”.
Hablamos de una agrupación acostumbrada a tener alrededor de 100 galas anuales, con una importante inversión económica. “La agrupación que pisa el Falla se gasta el dinero que no tiene para poder ir de la mejor manera al Concurso. Se pasa mal. Hemos pagado nuestros impuestos como todo el mundo, a pesar de no tener actuaciones ni entrar dinero. Hemos tirado de los ahorros. No queda otra que adaptarse a lo que hay y levantar la cabeza”, destaca. De momento, y a la espera de la evolución de esta crisis sanitaria, el grupo piensa retomar los escenarios en enero, con algunas galas ya programadas.
Después de un año casi en blanco de actuaciones llegaba otra decepción: la suspensión del Concurso de Agrupaciones 2021 y la imposibilidad de reunirse para ensayar. “Estamos dedicando a la familia el tiempo que no le hemos dedicado estos años, pero se echa de menos no poder vernos, el nerviosismo de estas fechas, de preparar el ensayo para la familia, de llevar a conocidos para escuchar la nueva comparsa. Supongo que para Antonio Martínez Ares habrá sido un alivio, por el desgaste en estas situaciones. Tenemos un grupo humano muy bueno, con muchas ganas de aprender y de disfrutar del regalo que supone ensayar con Antonio. Eso se echa de menos”, concluye.
También te puede interesar