La reforma del Mercado Central de Cádiz, pendiente de licitar las obras
El Ayuntamiento de Cádiz ya tiene el proyecto de actuación, elaborado por los propios técnicos, y la financiación que la pasada semana aprobó la Diputación Provincial
Quince años han pasado desde que el Mercado Central de Abastos de Cádiz reabrió sus puertas tras una profunda transformación que no tuvo exenta de problemas y que incluyó la construcción de un nuevo edificio interior donde se ubican hoy los puestos del pescado y de frutas. Una nueva vida para la actividad de los detallistas que, efectivamente, ha adaptado su camino y servicio en estos últimos años con la diversificación de los puestos y la vida que le ha otorgado el denominado rincón gastronómico.
Quince años después, el Ayuntamiento ya tiene lista la obra de rehabilitación o de arreglo de desperfectos y deficiencias que va a acometer en los próximos meses. Se trata de una intervención de calado a juzgar por el importe (más de medio millón de euros) y por el plazo de ejecución (previsto por los técnicos en una obra de nueve meses de duración), que será posible gracias a la financiación de la Diputación Provincial.
611.622,91 euros, en concreto, ha aprobado la administración provincial destinar a este proyecto de la capital. Una partida que ha sido incluida en la modificación presupuestaria que el gobierno de la Diputación (del PP) aprobó la pasada semana y que servirá para financiar el 100% de la actuación que había diseñado la oficina técnica del Ayuntamiento, que en un principio se había cifrado en 632.000 euros.
Con esa partida económica se va a procurar “la recuperación del estado original de los elementos de piedra arenisca que componen las columnas, los frisos y cornisas del entablamento, los arcos rebajados de los puestos de venta y la viga de madera corrida del entablamento”, así como “la reparación de los toldos verticales del pórtico de columnas”.
Las obras, con detalle
En el caso de las columnas, reseña el informe elaborado al efecto “diferentes afecciones” que presentan, como las humedades por capilaridad “que provocan desprendimientos de anteriores reconstrucciones superficiales de mortero”, reconstrucciones de acabados diversos y amplias fracturas en el fuste, fracturas con desprendimientos en los capiteles, o “algas verdes ocultas bajo reconstrucciones de mortero” en los pedestales de base.
La intervención en estos elementos arquitectónicos que rodean todo el interior del Mercado consistirá, en primer lugar, en la eliminación completa de las pinturas y morteros de reconstrucción dejando el material en su estado original, para proceder luego a una consolidación general, la restitución de los volúmenes desprendidos (ya sea mediante mortero de cal y arena de marmolina en la base y en el fuste, o con piedra natural, tallada in situ, en los capiteles) y la posterior protección de las columnas con productos químicos adecuados.
El segundo bloque de actuaciones se centrará en el friso y cornisa que rodea al edificio, donde se observan “fracturas y pérdidas volumétricas así como juntas abiertas entre sillares”, para lo que se plantea un trabajo de rejuntado y sellado de fisuras “que eviten la transmisión de humedades del exterior hacia el interior”.
También se actuará en las vigas de madera, donde se contempla aplicar un tratamiento general de las caras vistas consistente en una limpieza mediante cepillado superficial, retirando los refuerzos inadecuados, resanado de zonas astilladas, emplastecido de nudos y fendas excesivas, restauración volumétrica de oquedades mediante chirlas de madera de pino, con la aplicación del posterior tratamiento de protección.
Por último, se intervendrá sobre los arcos rebajados de los puestos, donde se aprecian “desperfectos en los arranques de las jambas y pilastras y en ciertas dovelas de los arcos de medio punto” que se achacan a la utilización de morteros de cemento que no casan bien con la cal, por lo que serán retirados y repuestos mediante morteros de cal.
A todo ello se unirá un trabajo mediante cepillado en seco de retirada de hongos y algas que contribuyen “a la degradación química de la piedra”.
Todo ello cuenta con un presupuesto de 555.557,50 euros, que en las próximas semanas saldrá a concurso al haber obtenido el Ayuntamiento la financiación necesaria, que asumirá la Diputación. A esta partida habrá que sumar la sustitución de los toldos del patio de columnas, lo que completará la financiación ya acordada e incorporada a los presupuestos de la provincia.