La renta en Cádiz: Un hogar en Bahía Blanca duplica los ingresos que tienen en La Viña

Bahía Blanca sigue siendo el barrio más rico de la ciudad de Cádiz. El adiós a los chalés que poblaban este barrio y su sustitución por edificios residenciales no ha modificado el nivel de vida de sus residentes.

Un año más, según el Atlas de Distribución de Renta de los Hogares que acaba de publicar el INE con datos referidos a 2021, Bahía Blanca encabeza la lista tanto en ingresos por habitante como por ingresos por unidad familiar en la capital.

En el otro platillo de la balanza, La Viña aporta la cifra de renta más baja.

Así, en determinadas vías de Bahía Blanca se llega a una renta familiar de 63.245 euros. De la misma forma, en vías de La Viña se llega a 29.667 euros. Es decir, una diferencia de 33.578 euros. O lo que es lo mismo, en Bahía Blanca se duplica la renta de La Viña.

Tras el parón estadístico provocado por la pandemia de coronavirus, Bahía Blanca ha incrementado su renta familiar en cerca de dos mil euros, lo que es una cifra más que notable. Sin embargo, ello no ha evitado que en el listado provincial le adelante en 2021 la zona residencial de Montealto, en Jerez de la Frontera, que llega a los 65.662 euros. Sí está por encima de Sotogrande (53.403 euros) y Vistahermosa (61.337 euros).

Resulta significativo el dato de Montealto, pues la renta media por persona de toda la ciudad de Jerez está sustancialmente por debajo de la gaditana: 16.356 euros frente a 12.549 euros, lo que indica la vitalidad que está alcanzado esta zona jerezana.

Lo cierto es que la propia delimitación urbana de Cádiz dificulta los cambios radicales en el lista de los distritos más o menos ricos. Sólo cabe esperar una mejora año tras año de los barrios con menor nivel de renta, especialmente por la llegada de nuevos residentes más que por un incremento de los ingresos de los vecinos ya veteranos.

Además, es en estos barrios donde vive un mayor porcentaje de vecinos mayores de 65 años, por lo que tiene una mayoría de jubilados, con lo que ello implica de merma en la renta anual.

Santa María del Mar y buena parte del tramo entre la Avenida y el Paseo Marítimo, acumula las familias con mayores ingresos, también en cuanto a renta per capita, tras Bahía Blanca.

En el casco antiguo sólo se acerca a estos indicadores residentes en determinadas zonas de la Alameda y los bloques militares cercanos a La Caleta.

En cuanto a los niveles más bajo de renta, junto a zonas de La Viña, el estudio incluye también tramos de La Paz-Cerro del Moro y en el área comprendida entre las avenidas de San Severiano y Perú.

En todos estos casos, y refiriéndonos a los ingresos por persona, la diferencia entre estos barrios y Bahía Blanca llega a los 11.000 euros.

Todos los distritos han mejorado los ingresos por persona en 2021 respecto a los que tenían en 2019, y la pandemia impactase de forma radical en la economía de todas las familias.

Son los distritos 8 y 10, en extramuros, los únicos que superan los 14.000 euros, con subidas entre 700 y 900 euros en estos dos años.

Es notable la recuperación del distrito 7, que comprende Santa María y La Merced, ya en el casco antiguo. Aunque tiene el nivel más bajo, con 9.729 euros, ha crecido en 700 en apenas un año. La Viña y su entorno llega a los 11.434, también con una subida notable en doce meses. Aunque este dato supere a Santa María, que el populoso barrio refleje los menores ingresos por familia se explica en que esta estadística se fija también en espacios más pequeños de los barrios, hasta localizar a los que tienen más o menos ingresos.

El informe incluye también el porcentaje de mayores de 65 años, donde La Viña sigue liderando en la ciudad, que en su global ya tiene a un cuarto de su población por encima de esta edad.

El estudio que sobre la renta familiar publica anualmente el INE, hace referencia también a la procedencia de los ingresos. Este dato sirve para analizar el dinamismo económico de una ciudad, su propio envejecimiento y la situación laboral de la misma.

Así, los ingresos por salario reporta algo más de la mitad del cómputo total. Le sigue, con el 25% del global, los ingresos por pensiones, y ya alejados las prestaciones por desempleo, otras prestaciones de carácter social y los que cuentan con otra modalidad de ingresos.