El silencio de Interior pone en peligro la nueva Comisaría para Cádiz en Astilleros

La ejecución del Plan Plaza de Sevilla se ha convertido en un camino lleno de problemas para el Ayuntamiento desde que lo planteó por primera vez hace décadas.

Cuando todo parecía que iba bien encarrilado, tras conseguir el gobierno de José María González reactivar el proyecto con la firma de un nuevo convenio con Adif, vuelve a ser un organismo de la administración central el que pone una nueva piedra en todo este proceso.

En este caso es el Ministerio del Interior. El silencio que se alarga desde hace meses respecto al proyecto de la nueva sede de la Comisaría Provincial, que inicialmente iba a ocupar buena parte de la parcela municipal ubicada en la avenida de Astilleros, pone en peligro su participación en esta operación, incidiendo en otras zonas de la ciudad incluidas en las conversaciones que mantenía este departamento con el Ayuntamiento.

Aunque hace meses el gobierno local ofreció al Ministerio del Interior la colaboración del área de Urbanismo para elaborar el proyecto del nuevo complejo policial, nada se ha avanzado desde entonces; mientras, se ultiman las obras de remodelación de la vieja comisaría en la Avenida, que se suponía iba a derribarse y que, tras la elevada inversión realizada en la misma, todo hace prever que seguirá en funcionamiento muchos años más.

Una vez que Aguas de Cádiz ha iniciado el proceso para la instalación de la nueva red de saneamiento y abastecimiento que cruzará la avenida de Astilleros, esencial para la puesta en uso del Mercado Gastronómico y el hotel sobre el vestíbulo de la estación ferroviaria, la intención del Ayuntamiento era activar otras partes del proyecto, entre ellas la puesta en uso de la parcela de su propiedad.

Este suelo, con cerca de 3.500 metros cuadrados de superficie, pasó a manos del Ayuntamiento tras la modificación del convenio firmado con Adif en 2008: la ciudad se quedaba con este suelo y con el del futuro parque de la Muralla a cambio de asumir la urbanización de todo el Plan Plaza de Sevilla.

Buena parte de este terreno se iba a dedicar a sede de la nueva Comisaría, mientras que el Ayuntamiento pasaba a ser propietario del edificio de la avenida de Andalucía y de las dependencias policiales junto al frente de la muralla de Puerta de Tierra.

Sin embargo, ante la falta de movimiento por parte de Interior, el Ayuntamiento ha lanzado una advertencia: "Seguimos esperando a que el Ministerio se pronuncie pues es una infraestructura muy importante para la ciudad, especialmente por la precariedad de la actual sede policial. Pero que quede claro que nosotros no vamos a estar esperando eternamente. Y si en un tiempo prudencial el Gobierno Central no responde, nos tendremos que olvidar de este proyecto", afirma a Diario de Cádiz el teniente de alcalde de Urbanismo, Martín Vila.

Indica Vila que, en caso de dar este paso, "contamos con un ‘plan B’ para este suelo" pues se cuentan con ofertas del sector privado para ocupar este terreno, por lo que el abandono de Interior no significaría dejar la parcela sin uso.

Inicialmente está prevista que una pequeña parte de la misma se ocupe por las nuevas oficinas del Servicio de Empleo.

Tiene claro el edil de Urbanismo que esta operación no puede sufrir más parones. “Cuando llegamos nos encontramos el convenio de la Plaza de Sevilla atascado, sin que en doce años se hubiera ejecutado nada y sin perspectivas de avanzar de nuevo. Ha sido nuestro esfuerzo y nuestro trabajo el que ha logrado un nuevo documento que permite al Ayuntamiento tener más capacidad en el desarrollo de esta zona, y con ello activar de una vez por todo lo que estaba parado”.

A todo ello se le une el pronto inicio de las obras de Aguas de Cádiz, que está en proceso de licitación y que facilitará que de una vez por todas se pueda avanzar en el proyecto del Mercado Gastronómico y en el hotel.