Suspendida la licitación del contrato de Ayuda a Domicilio en Cádiz
El Tribunal de Recursos Contractuales de la Diputación Provincial establece esta medida cautelar ante la denuncia presentada por la Asociación de Empresas de Servicios para la Dependencia (Aeste) en relación al pliego de condiciones del nuevo contrato
El Ayuntamiento de Cádiz ha recibido un duro varapalo en su objetivo de dotar de nuevas y mejores condiciones el servicio municipal de Ayuda a Domicilio. El Tribunal de Recursos Contractuales de la Diputación Provincial ha determinado la suspensión cautelar del proceso de licitación que había puesto en marcha el Ayuntamiento, a tenor de la denuncia presentada por la Asociación de Empresas de Servicios para la Dependencia (Aeste).
Esta entidad, que aglutina a las principales empresas españolas del sector de la Dependencia (entre ellas la que actualmente presta el servicio, Domus Vi), ha reclamado la adopción de medidas cautelares ante una serie de denuncias que ha elevado respecto a las condiciones fijadas en el pliego aprobado por el Pleno del Ayuntamiento y que salió a concurso el pasado 6 de septiembre. Y el instructor del Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales ha resuelto aceptar esta cautelar hasta analizar con detalle la denuncia presentada y determinar si Aeste está o no en posesión de la razón.
Según fuentes de la asociación, el motivo del recurso presentado es que el pliego que ha salido a concurso "no es viable económicamente". En concreto, se refiere Aeste al acuerdo que adoptó la representación de los trabajadores del servicio con la actual empresa y en presencia del Ayuntamiento de un complemento salarial de 200 euros a toda la plantilla. "Ese acuerdo no lo contempla el pliego", remarcan las empresas agrupadas en esa asociación nacional, que ante esta situación y teniendo en cuenta que en este contrato "los costes laborales son fundamentales" porque se llevan el gran porcentaje del precio, no se puede asumir el servicio con las condiciones fijadas por el precio establecido.
Justifica el instructor que la mediación de este tribunal tiene como principal objetivo "que una decisión ilegal no se pueda consolidar por la perfección del contrato", por lo que el análisis de la denuncia y la resolución que al respecto adopte este órgano hacen oportuno suspender cautelarmente el procedimiento para evitar "que se puedan causar otros perjuicios a los interesados afectados y especialmente al posible adjudicatario, en caso de acordarse la retroacción de las actuaciones".
Ahora, por tanto, queda en suspenso el proceso de licitación, a la espera de que este tribunal resuelva. En caso de que considere que la asociación denunciante lleva razón, es probable que el Ayuntamiento tenga que revisar las condiciones del pliego, lo que supondría volver de nuevo a la casilla de salida e iniciar la aprobación del expediente y, con posterioridad, una nueva licitación. Y si ocurre lo contrario y el tribunal considera que Aeste no tiene razón en su reclamación, el proceso se retomaría desde el punto en que ha quedado ahora.
Un procedimiento conocido en Cádiz
Lo ocurrido con la licitación del contrato de Ayuda a Domicilio recuerda perfectamente a lo que hace unos años ocurrió, y por varias veces, con la licitación del nuevo contrato de limpieza de la ciudad. Aquel tortuoso proceso quedó varias veces paralizado por este Tribunal de Recursos Contractuales; y la primera de las ocasiones fue la asociación de empresas de limpieza (como ahora ha hecho la de empresas de dependencia) la que presentó recurso en contra del pliego de condiciones. Recurso que en aquella ocasión fue aceptado por el Tribunal, obligando al Ayuntamiento a partir nuevamente de cero.
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