La tormenta perfecta para la subida de precios de la vivienda en Cádiz

Los colectivos contrarios a la masificación de las viviendas turísticas consideran que la presencia de estas en los cascos antiguos de las ciudades han disparado el precio de los pisos, y provocado la salida de vecinos que no pueden hacer frente a estos precios, tanto en cuando a la venta como en el alquiler.

En comparación con otras ciudades donde también se ha alertado sobre la turistificación, Cádiz tiene unas características muy especiales.

Por lo pronto, el elevado precio de la vivienda no es nada nuevo. Llevamos décadas con un coste muy por encima de la media nacional. La falta de suelo y una demanda muy por encima de la oferta existente, no han ayudado nunca a la relajación del precio en Cádiz.

Hoy, según el portal Idealista, el precio del metro cuadrado está en 2.885 euros el metro cuadrados (entre los más altos del país). Hace quince años, antes de la crisis económica y la caída del sector inmobiliario, el coste era de 2.656 euros, apenas 200 euros menos que actualmente. Sin embargo, en 2016, el año de la llegada de los primeros pisos turísticos, el metro cuadrado estaba 1.000 euros por debajo del actual.

Junto a ello, desde 1999 el casco antiguo ha experimentado una profunda remodelación de su parque inmobiliario. Su arreglo llegó antes del tirón turístico y la llegada de los nuevos modelos de alojamiento. Una situación que entra en contradicción con lo dicho por el consejero de Turismo en una entrevista a este diario publicada el pasado domingo.

Arturo Bernal destacaba que “gran parte de la rehabilitación en el centro de las ciudades se debe al turismo. Antes eran zonas inhóspitas, con casas apuntaladas, calles inaccesibles porque te podían atracar...”. Una visión que nada tiene que ver con el Cádiz previo a la llegada de las nuevas formas de alojamiento. 

Pequeños hoteles y algunos bloques de apartamentos turísticos abiertos en los últimos cinco años sí han salvado a edificios emblemáticos que llevaban muchos años cerrados en el centro de Cádiz. Esta cuestión llegó a ser resaltada como muy positiva por el propio estudio que sobre la turistificación se encargó durante el gobierno de José María González.

Así, Cádiz no deja de estar metida en la ola de subida de precios en el mercado inmobiliario que afecta a buena parte del país. El propio portal Idealista indica que el precio del metro cuadrado el pasado junio alcanzó su récord histórico, con una subida anual del 11%.

La Viña es uno de los barrios donde más ha subido el precio de la vivienda. En mayo su metro cuadrado estaba en 2.712 euros. Este es uno de los barrios, junto a áreas del centro y San Juan, donde más se ha notado la presión de las viviendas y apartamentos turísticos. Hay calles del barrio con varios edificios dedicados exclusivamente a apartamentos, inmuebles relativamente modernos que sí se podían haber destinado a viviendas. 

El plan contra la turistificación aprobado por el anterior gobierno municipal, y ratificado en su totalidad por el actual, ya destacaba que en la ciudad contaba con 152 fincas susceptibles de tener usos turísticos (hoteles y apartamentos, no viviendas), entre las que tienen grado 0 y 1 de protección.

Cádiz tampoco se libra de los tirones al alza en el mercado de alquiler. Desde hace años, la oferta apenas supera los 300 pisos en la ciudad, de los que un elevado porcentaje se limita al periodo escolar o a la temporada estival. Así, el exceso de demanda mantiene los precios disparados. El último informe de Fotocasa, conocido este mismo lunes, indicaba que el precio medio del alquiler en junio llegaba a los 942 euros. Un precio desorbitado.