Un vistazo centenario

Cádiz/115 años, cuatro generaciones y con la quinta pidiendo paso, 25 empleados en la actualidad y otros muchos que han pasado a lo largo de este siglo y pico de vida, cinco tiendas, la última de ellas alumbrada hace muy poco tiempo en la barriada de La Paz y, sobre todo, miles de clientes que han puesto su vista en manos de Multiópticas Iglesias.

El fundador Manuel Iglesias Antolínez puso una tienda en la calle Sacramento número 8 en 1902 relacionada principalmente con la fotografía. Su hija única se casó con José Amaya Serván y a partir de ahí el negoció empezó a derivar al campo de la óptica. Sin embargo, en tiempos e la Guerra Civil y ante las dificultades para salir adelante, el negocio empezó a ampliar el catálogo de productos y en la tienda de Sacramento se vendieron desde lápices, bolsos, maletas, etcétera, aunque sin perder vista el principal objeto de la tienda, que era el de la óptica.

A principios de los 60 ya empezó a tomar las riendas del negocio el actual patriarca de esta familia, Manuel Amaya Iglesias. Este decidió viajar a Madrid para ver cómo estaban en la capital de España estos negocios y lo que vio allí es lo que quería para su tienda, de manera que tomó el modelo de unas de las grandes cadenas para trasplantarlo a la suya de la calle Sacramento.

Eso fue, como dice su hijo José Amaya Vidal, miembro de la cuarta generación que actualmente regenta el negocio, "un salto cuantitativo y cualitativo". Después de tantos años, el propio protagonista de aquel viaje cree que aquella decisión fue la acertada porque hoy en día "sólo hay cuatro o cinco negocios de óptica en España con 115 años de historia".

Durante muchos años además han dado servicio a mucha gente de localidades como Vejer, Conil, Barbate, Medina y Chiclana y precisamente hace 20 años empezó la expansión de este negocio familiar en esta última localidad. Después vinieron los de la avenida Ana de Viya, Columela y ahora la avenida de Guadalquivir, además de dos centros auditivos, una expansión que se llevó a cabo en plena crisis económica y con la cuarta generación al frente del negocio con los hermanos José, María y María Dolores Amaya Vidal y José María Herce y Gema Rodríguez-

Y en toda historia aquel establecimiento que se fundó en 1902, 86 años después dio otro paso decisivo al entrar en la cooperativa Multiópticas, que cuenta en la actualidad con más de 160 socios y 600 establecimientos. Manuel Amaya fue precisamente consejero de la misma durante ocho años y en otros 14 fue el presidente.

Esto les permite entre otras muchas coas, acceder a productos exclusivos, a campañas de publicidad a nivel nacional y a participar también en una Fundación que realiza multitud de acciones solidarias por buena parte del mundo.

Manuel Amaya Iglesias asegura que su mantra ha sido el de "trabajar, trabajar y trabajar" en toda su trayectoria y tiene muy claro que "hay que sacrificarse mucho para que los negocios vayan bien".

Un negocio familiar tiene muchas ventajas y algunos inconvenientes pero una cosa que está clara es que hay un fuerte sentimiento de pertenencia porque desde que eran muy pequeños han ido viendo evolucionar esta marca que ha sido Multiópticas Iglesias. Y con la cuarta generación al frente, ya hay una quinta que está preparándose para tomar el relevo en un futuro.

Otro de los aspectos que resalta esta familia es que esta no se reduce sólo a los que llevan el apellido Amaya, sino que se traslada también a los trabajadores, muchos de los cuales llevan ya bastantes años trabajando. Y mientras que miran para atrás para valorar lo que significan 115 años de historia, ven el futuro con mucho optimismo y con ganas de seguir creciendo.