Cádiz CF - Real Madrid: una derrota asumible
El cuadro amarillo acepta con naturalidad perder ante un rival inabordable
La injusta tarjeta amarilla a Rubén Alcaraz explicada por el árbitro que el club debería recurrir
Cádiz/El Cádiz CF puso toda la carne en el asador, pero se topó con un Real Madrid en plena forma que, a diferencia del año pasado, esta vez sí se tomó en serio la visita al estadio Nuevo Mirandilla. Además de su sobrada calidad, los hombres de Carlo Ancelotti corrieron como cohetes sin pensar que tres días después debían visitar a Chelsea en la vuelta de los cuartos de final de la 'Champions'.
El conjunto amarillo perdió 0-2 pero la derrota pudo ser mucho más abultada. No es un asunto menor la diferencia porque a estas alturas de la temporada todo cuenta, incluido el saldo general entre tantos marcados y recibidos que puede llegar a ser determinante en el desenlace del campeonato. Tras caer ante el gigante blanco, presenta un balance de -19 (23 a favor y 42 en contra).
Los de Sergio González hicieron todo lo que estaba en su mano. Pusieron intensidad, pelearon en cada jugada, defendieron con todo, David Gil estuvo fantástico, trataron sin éxito de sorprender a la contra... Pero no era el día más propicio para repetir la campanada que ya habían dado en el Benito Villamarín. Aguantar 90 minutos al mejor Madrid del curso era una misión (casi) imposible.
La derrota entraba dentro del encuadre de la lógica y hay que tomarla como tal. Nada de traumas. Todo lo contrario. Más de 70 minutos con la portería a cero ante un rival de aúpa. Quedarse con lo positivo es lo apropiado sin olvidar que siempre es posible mejorar.
Lo normal era perder frente al vigente campeón de Liga y Europa. Sumar hubiese un acontecimiento que habría permitido añadir algún punto extra a la previsión de las cuentas. Los puntos son obligados en otros partidos en los que sí que tendrá que avanzar el Cádiz CF para agarrarse un año más a la máxima categoría del fútbol español.
En el Cádiz CF asumen con naturalidad la derrota en el choque de la 29ª jornada que ni mucho menos supone un golpe negativo ni tampoco distorsiona el enfoque. Había que intentarlo pero perder ante el superpoderoso es un hecho más que asumible. La derrota para un modesto es consustancial a su militancia en la élite.
En el vestuario son conscientes de que las opciones de seguir en Primera División pasan por lo que está por venir en los próximos capítulos: Espanyol, Osasuna, Valencia... Es ahí cuando el Cádiz CF está abocado a dar un paso más, el definitivo, para cumplir el objetivo que da sentido a la temporada. Depende de sí mismo y sigue en una buena situación pese a caer ante un grande.