El próximo rival del Cádiz CF está centrado en iniciar la Europa League con buen pie

Sevilla/El Betis pasó página de la debacle en Montjuïc y está centrado ya en el estreno de la fase de grupos de la Europa League, en Glasgow, ante el Rangers, en un enfrentamiento entre dos equipos que se miden por primera vez en la historia en partido oficial. Una cita antes de que el Cádiz CF se presente el domingo en el Benito Villamarín.

Será en el histórico Ibrox Stadium, conocido desde 1899 hasta 1997 como Ibrox Park, la casa por excelencia de la mitad protestante de la ciudad más importante de Escocia junto a la capital, Edimburgo, que ya se prepara para recibir a un conjunto verdiblanco que tendrá delante a un rival que llega a la segunda competición europea de clubes después de ser eliminado por el PSV Eindhoven (por un global de 7-3).

Además, el cuadro escocés intenta no perder comba en la Premiership con respecto al líder, el Celtic, aunque mantiene la ilusión de hacer un buen papel en un torneo en el que rozó la gloria en esa final de mayo de 2022 perdida en Sevilla ante el Eintracht de Fráncfort (1-1, y en los penaltis ganaron los alemanes).

El Rangers es, actualmente, cuarto en el campeonato liguero escocés con 9 puntos, a cuatro del Celtic. Esta última jornada se impuso de visitante (0-2) al colista, el St. Johnstone, en un duelo en el que acabó lesionado su gran referente en ataque, el delantero brasileño Danilo, que ha llegado este verano procedente del Feyenoord a cambio de algo más de seis millones de euros. Es la gran apuesta del cuadro que entrena el inglés Michael Beale, aterrizado este curso procedente del Queens Park Rangers para liderar una profunda reestructuración del plantel con respecto al de la pasada temporada.

Las armas del Rangers están muy definidas, ya que es un conjunto que busca los ataques por las bandas, no huye del uno contra uno de sus jugadores más habilidosos, sale muy bien a la contra y saca bastante provecho de las acciones ofensivas a balón parado. En negativo, es un conjunto que suele sufrir desconexiones importantes en los partidos, con errores groseros a nivel individual, no se maneja bien del todo a la hora de tirar el fuera de juego y suele conceder al rival tiros de media distancia sin demasiada oposición.

Importantes desajustes que Michael Beale intenta, poco a poco, subsanar para que su equipo alcance la regularidad necesaria para hacer disfrutar a los más de cincuenta mil hinchas (50.987) que acuden en cada partido a unos de los templos por excelencia del fútbol británico. Un recinto que registrará el jueves un lleno absoluto y en el que el Betis buscará su primera victoria en suelo británico, el cual ha visitado ya en cinco ocasiones y nunca ganó. La temporada pasada, también en Glasgow pero en Celtic Park, los de Pellegrini, con la clasificación ya en el bolsillo, perdieron (3-2). El Celtic se adelantó en dos ocasiones con los tantos de Welsh y Henderson, empatando los heliopolitanos con a través de Bain, en propia puerta, y Borja Iglesias. Sin embargo, Turnbull, de penalti, dejó los tres puntos en el casillero de los blanquiverdes.

En las otras cuatro visitas oficiales a la Gran Bretaña, el Betis encajó tres derrotas y un empate ante rivales ingleses: 0-0 frente al Liverpool en Anfield (Liga de Campeones en la 2005-06), 4-0 en casa del Chelsea en la misma competición, 3-1 también ante los londinenses en la Recopa de Europa 1997-98 y un 4-1 ante el Manchester United la pasada temporada en octavos de final. Ahora, nueva ocasión para el Betis en el Ibrox Stadium.