Decidirá el Carranza (1-1)

Gran partido del Cádiz en el Carlos Tartiere, aunque la eliminatoria queda abierta y se decidirá en tierras gaditanas. Jona adelantó a los amarillos, que pudieron sentenciar, y Cervero puso las tablas en el 81

Foto: LOF
D.m.r. /Cádiz

24 de mayo 2015 - 15:43

El Cádiz dio un paso de gigante en su camino de vuelta a Segunda División al lograr un valioso empate a uno en su visita al Carlos Tartiere de Oviedo. El resultado es muy positivo para los amarillos, que sin embargo vuelven de tierras asturianas con la sensación de haber podido incluso sentenciar la eliminatoria tras tener a los de Sergio Egea contra las cuerdas durante muchos minutos. Jona adelantó a los gaditanos en el 45', culminando una espectacular primera parte, y Cervero empató a falta de nueve minutos para el final, dando vida a los suyos de cara a la vuelta. La peor noticia para Claudio Barragán fue la absurda expulsión por doble amarilla de Garrido, que no podrá estar dentro de siete días en Carranza. Será entonces cuando se decida el ascenso.

De inicio se vio a un Cádiz valiente, que no tardó en buscar con descaro la meta de Esteban. En los primeros minutos los amarillos ya forzaron un par de saques de esquina gracias a su intensidad en la recuperación y su verticalidad en ataque. El Oviedo, por su parte, parecía más por la labor de esperar y buscar la contra y así llegó su primer acercamiento a la meta de Aulestia. Por suerte, Omgba optó por el tiro cuando tenía varias opciones de pase y la jugada se resolvió sin peligro para los visitantes. Diez minutos de juego bastaron para comprobar que la intención de los amarillos era la de dominar el juego ante un rival que optaba por esperar y salir con fuerza al contrataque.

Con el paso de los minutos el partido se igualó, el respeto se impuso al atrevimiento y la batalla táctica le ganó la partida al juego. Así, hubo que esperar hasta el 26 para ver la primera ocasión clara del encuentro. Tras un gilicórner de Kike Márquez y una serie de rechaces, el balón acabó en botas de Fran Machado, que no supo definir con fuerza ante Esteban cuando le encaraba desde el vértice izquierdo del área. Poco después fue Josete el que probó fortuna desde lejos con un espectacular disparo que sacó Esteban de la misma escuadra, aunque el árbitro había anulado la jugada por un presunto (e incomprensible, todo hay que decirlo) fuera de juego.

El planteamiento de Claudio Barragán estaba funcionando a la perfección. Verticalidad en ataque y contundencia a la hora de despejar. Pero bastó un fallo del Cádiz en la salida de balón para que el Oviedo disfrutara de su mejor ocasión en toda la primera parte. Una buena combinación en la frontal la culminó Borja Valle con un disparo raso que sacó Aulestia con un paradón junto a la base del poste. Y de lo que pudo ser el 1-0 al merecido 0-1, una explosión de alegría para los amarillos justo cuando se alcanzaba el minuto 45. Juan Villar avanzó por la derecha, sirvió al área y en el segundo palo apareció el goleador Jona para poner al Cádiz por delante en el partido y en la eliminatoria. El primer paso, el más importante, ya estaba dado.

La segunda parte comenzó, como era de esperar, con un Oviedo mucho más lanzado que en los primeros 45 minutos. La banda izquierda cadista era la que más sufría con las internadas de Susaeta, el mejor de los carbayones, aunque el cuadro amarillo, muy serio, no daba concesiones a su rival. Sin embargo fueron de nuevo los de Claudio los que estuvieron cerca del gol en el 53, cuando Servando cazó un rechace dentro del área pero su disparo se marchó fuera.

El Oviedo apretaba especialmente a balón parado, mientras que el Cádiz seguía apostándolo todo a la presión y el control. En el 74 el recién incorporado Sergio García metió el miedo en el cuerpo a los cadistas con un potente disparo que Aulestia rozó lo justo para que se estrellara contra el palo de la meta cadista. Sergio Egea lo apostó todo al ataque con la salida del ariete Cervero y el partido se complicó para los amarillos, algo faltos de fuelle tras el enorme esfuerzo realizado. En el 81, los malos presagios se confirmaron cuando Borja Valle centró desde la derecha y el tanque ovetense cabeceó de forma inapelable a la red. Un empate que devolvía a los carbayones de lleno a la eliminatoria.

Tras el empate, poco juego y mucha tensión. La peor parte se la llevó el Cádiz, que perderá a Garrido para la vuelta tras una torpeza del vasco, que empujó a un rival sin balón y se ganó su segunda tarjeta amarilla. Podía haber sido expulsado incluso antes por una fea entrada a Linares. Una mala manera de acabar la ida de una eliminatoria en la que los amarillos fueron mejores durante muchos minutos pero que finalmente se decidirá en Carranza.

FICHA TÉCNICA

Real Oviedo: Esteban, Nacho López, Dani Bautista, Jonathan Vila, David Fernández, Jon Erice, Héctor Font (Sergio García, 68’), Omgba (Cervero, 76’), Susaeta, Borja Valle (Generelo, 86’) y Linares.

Cádiz CF: Aulestia, Mantecón, Josete, Servando, Tomás, Garrido, Espinosa, Juan Villar, Kike Márquez (Navarrete, 78'), Fran Machado (Hugo, 86') y Jona (Airam, 63').

Goles: 0-1 (45') Jona. 1-1 (83') Cervero.

Árbitro: Vicente Moral (castellano-leonés). Amonestó a los locales Linares y Dani Bautista y al visitante Airam. Expulsó por doble amarilla a Garrido (90’).

Incidencias: Partido disputado en el Carlos Tartiere ante unos 30.000 espectadores.

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