Jesús Casas firma con Iraq

Cádiz/Ya es oficial. Este domingo Jesús Casas ha estampado su firma como nuevo seleccionador de Iraq. En las últimas horas el madrileño de nacimiento y gaditano de pleno derecho se había desplazado hasta Bagdad para cerrar toda la operación. Y ha sido hoy cuando ha estampado su firma.

Toma el relevo a Dick Advocaat, quien dimitió el pasado mes de noviembre de 2021, si bien Razzaq Farhan se encontraba como técnico interino hasta que en el pasado mes de enero Irán apartó a los iraquíes de poder estar en el Mundial.

Jesús Casas, con un intenso pasado en el Cádiz CF, vivirá su segunda experiencia trabajando en un combinado nacional tras su ciclo en la selección española con Luis Enrique y Robert Moreno. Todo ello sin olvidar su ciclo en el Barcelona.

A principios de este año, el gaditano prefirió dar por acabada la etapa en el combinado español, y desde entonces no le han faltado propuestas y ofertas. Precisamente hace pocas fechas sonó para el proyecto del histórico Deportivo, que aguanta como puede en la tercera categoría nacional.

Al frente de la selección iraquí, Jesús Casas se lleva a otro ex del Cádiz CF como es Alejandro Varela, así como a Salva Romero, que estaba de segundo entrenador en el Recreativo de Huelva.

Cuando en el verano de 2011 Jesús Casas planificaba el estreno en Primera Andaluza, al final fallido, del desaparecido Deportes Romero, era difícil imaginar que siete años después iba a estar de preparativos pero para desembarcar nada menos que en el cuerpo técnico de la selección española absoluta. Ganado a pulso y a base de un trabajo que le ha reportado muchos éxitos, este gaditano y con pasado cadista, hasta aquel 2018, tocaba el cielo del fútbol español de la mano de Luis Enrique, que al igual que sucedió en el FC Barcelona, le quiso a su lado en un proyecto potente. Posiblemente lo máximo para un español.

Jesús Casas estuvo trabajando para el Watford, al que llegó tras poner punto y final a su labor como máximo responsable de la cantera del Cádiz CF. Javi Gracia se lo llevó como segundo con el objetivo de salvar la categoría en la Premier League, lo que al final logró. Casas preparaba el arranque de la nueva campaña en los últimos días hasta que tomó forma la posibilidad de que Luis Enrique fuera nombrado seleccionador. A partir de ese momento el gaditano frenó muchas gestiones, ya que recibía la llamada del preparador asturiano, que de nuevo le quería trabajando con él en el cuerpo técnico. Y fue uno de los hombres fuerte de Luis Enrique, más allá del control de la labor de seguimiento y análisis que había liderado en la etapa de ambos en el Barcelona.

Como jugador, Casas ingresó en la cantera del Cádiz CF en 1985, llegando al primer filial en 1992 y saliendo del mismo en 1995 tras estar cedido en el Atlético Sanluqueño. Posteriormente pasó por el Chiclana CF, Jerez Industrial y Puerto Real, jugando con estos dos últimos equipos sendas fases de ascenso a Segunda División B. Como técnico: Cádiz juvenil, Balón juvenil (ascenso), Balón sénior (ascenso), Cádiz B, Rota y Deportes Romero (ascenso). Además, trabajó para la dirección deportiva del club cadista en la elaboración de informes, parcela en la que cuenta con un gran cartel. E incluso fue el máximo responsable del fútbol base. Todo ello sin olvidar su papel como informador y analista del Eibar y del Barcelona B, lo que le abrió las puertas del primer equipo azulgrana.

La selección española fue la recompensa para un entrenador aún joven que en los últimos años lleva una trayectoria meteórica que se ha ganado el reconocimiento general del mundo del fútbol. Tanto, que un fútbol en crecimiento, como el iraquí, que pretende revivir glorias perdidas lo ha llamado a filas para que se ponga al frente de la selección. Todo un reto que el gaditano de adopción toma con toda la ilusión del mundo.