Un árbitro recién ascendido para la cita clave del Cádiz CF

El Comité Técnico de Árbitros (CTA) ha dado a conocer la designaciones correspondientes a los once partidos que forman parte de la 23ª jornada en Segunda División que arranca este viernes 17 de enero, aunque el envite entre el Eldense y el Cádiz CF se disputará este sábado en el estadio Nuevo Pepico Amat (16:15 horas).

El colegiado elegido para el encuentro entre el cuadro valenciano y el equipo amarillo es Manuel Ángel Pérez Hernández (35 años), perteneciente al comité madrileño. Después de seis temporadas en la categoría de bronce (tres en Segunda División B y otras tantas en la denominada Primera Federación), está viviendo la campaña de su estreno en la categoría de plata, en la que hasta la fecha ha dirigido 12 encuentros resueltos con un saldo de seis victorias locales, dos empate y cuatro triunfos visitantes. Entre su ascenso y el descenso del Cádiz CF, ahora coinciden en la misma categoría y será la segunda vez que pite a los amarillos. La primera fue en la octava jornada, en el Huesca-Cádiz (3-1), que resultó un estreno adverso con este trencilla de por medio.

Era la primera vez que Manuel Ángel Pérez Fernández (comité madrileño) dirigía un encuentro al cuadro gaditano, al que señaló dos penas máximas en apenas 20 minutos. La primera la falló Óscar Sielva (lanzó fuera) y la segunda la transformó para poner el 1-0 justo antes del intermedio.

El responsable del VAR es un colegiado que sí ha arbitrado en varias ocasiones al conjunto gaditano. Se trata del cántabro José Antonio López Toca (42 años), quien llevó las riendas en ocho partidos del Cádiz CF entre Segunda B, Copa del Rey y Segunda. El balance de los gaditanos con López Toca es de de un solo triunfo, tres empates y cuatro derrotas. El antecedente más cercano se remonta al curso 2019-20 (el del último ascenso) cuando los amarillos ganaron 1-2 en el terreno del Numancia con goles de José Mari y Juan Cala.

Por lo tanto, el equipo de Gaizka Garitano acude a una cita en la que se juega mucho por tratarse el rival un enemigo directo en la pelea por la permanencia, y lo hace con un árbitro con en el que en el único antecedente que existe no fue capaz de puntuar.