El Cádiz CF, en alerta: visita al mejor local de la Liga

Cádiz/El Cádiz CF se acostumbra a vivir en una crisis permanente que sólo tendrá solución si es capaz de alejarse de la zona de descenso y a la vez se meta de lleno en la pelea por el ascenso. La plantilla está diseñada para luchar por el objetivo más ambicioso pero de momento anda extraviado en la zona baja de la clasificación.

El conjunto entrenado por Paco López se halla en una situación bastante complicada justo cuando afronta partidos lejos de su feudo, donde su producción ha decaído con tres derrotas en las tres salidas más recientes en las que ha recibido seis goles y ha marcado sólo uno.

Cuando precisamente baja su rendimiento como foráneo, le toca enfrentartse a un hueso duro. El cuadro gaditano se mide al Mirandés en el Municipal de Anduva el próximo sábado 9 de noviembre (16:15 horas) en el marco de la 14ª jornada de Liga.

Muy bien lo tiene que hacer el Cádiz CF para poder conseguir el triunfo en el terreno del mejor anfitrión de la categoría de plata. El Mirandés es temible en su estadio, donde ha sumado 16 puntos de 21 en su hogar con cinco victorias, un empate y una sola derrota (0-1 ante el Granada).

El equipo que ejerce de anfitrión presenta números que demuestran su poderío en casa. Ha marcado ocho tantos en su terreno y le han hecho sólo dos en siete partidos. Es con diferencia el local menos goleado de Segunda División.

Las cifras de uno y otro anticipan la complejidad de la misión que afronta un Cádiz CF obligado a vencer si no quiere correr el riesgo de caer a la zona de descenso el próximo fin de semana.

El problema es que los amarillos no suelen dar la talla ante los rivales que son más fuertes en su campo. El pasado sábado perdieron (2-0) en El Molinón ante el Sporting de Gijón, que con 16 puntos comparte con el Mirandés el cartel de mejor local del torneo. Los gaditanos también cayeron en Ipurua ante el sexto mejor anfitrión (el Eibar) y en El Alcoraz frente al octavo (el Huesca).

El recorrido del Cádiz CF no invita al optimismo pero en teoría hay mimbres más que suficientes para poder ganar en cualquier campo. Para ello es indispensable que los jugadores se empleen con la máxima concentración de principio a fin y sean eficaces en la dos áreas, que es dónde se deciden los partidos.