El Cádiz CF no aprovecha el momento
El conjunto amarillo no termina de traducir su mejoría en victorias
Chris Ramos, el máximo goleador de la Liga con la cabeza
Preocupación en el Cádiz CF por el estado físico de Roger Martí
El Cádiz CF se acostó el sábado colocado en zona de descenso tras la victoria del Celta de Vigo sobre el Granada, pero escapó de ella enseguida tras el empate que obtuvo en el terreno de la unión Deportiva Las Palmas el domingo 17 de diciembre. Sufrió de lo lindo para llevarse un punto del estadio de Gran Canaria y no fue por falta de ocasiones. Remató el doble de veces que su contrincante y no fue hasta el tramo final cuando Chris Ramos marcó el tanto de la igualada con un cabezazo incontestable tras un saque de esquina lanzado por Robert Navarro.
El Cádiz CF consigue frenar la secuencia de derrotas y se adentra en una espiral de empates que de momento le sirve para sobrevivir. Cuatro consecutivos con idéntico resultado: 1-1 ante el Mallorca, Celta de Vigo, Osasuna y Las Palmas.
Es decir, cuatro puntos de los últimos 12 que muestran la doble realidad de los empates, que sirven para esquivar la derrotas pero no son útiles para avanzar con paso firme, sobre todo cuando son 13 las jornadas seguidas sin poner en práctica el verbo ganar. De hecho, el Cádiz CF pasa de estar tres puntos por encima del descenso a sólo uno.
A la espera de que lleguen las victorias, imprescindibles para poder optar a la permanencia en Primera División, el equipo de Sergio González ofrece mejores sensaciones en el juego a pesar de sus carencias en ataque tal como reflejan los números. Con sólo 14 goles, es el equipo menos anotador del campeonato junto con el Mallorca y el Deportivo Alavés.
El problema es que esa evolución no se traduce en triunfos. El discurso que viene a decir que 'si seguimos así llegarán las victorias' se estira como un chicle mientras pasan las semanas sin dar un necesario golpe de tres puntos que otorgue un plus de tranquilidad.
El Cádiz CF no aprovecha el momento. Entre los malos arbitrajes (ante el Celta y el Osasuna) y la escasa puntería de cara a puerta, no da con la fórmula para despejar el camino aunque progresa en su manera de competir. Se mueve en un doble escenario mientras se prepara para seguir encarando oportunidades de crecer.
Una de las claves pasa por las áreas. O consigue cerrar la portería o está obligado a marcar más de un gol a favor en cada partido para poder celebrar una alegría completa. No es fácil que lo logre dadas sus dificultades en la misión ofensiva.
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