El Cádiz CF no supera un escollo que no había sufrido antes con Garitano

Cádiz/¿Por qué perdió el Cádiz CF en el campo del Albacete? La primera derrota de la etapa de Gaizka Garitano llegó de manera contundente, con un 3-0 que pocos podían esperar después de diez jornadas consecutivas sin perder. El duro traspié fue la demostración de que este equipo no está para aspirar al premio gordo. No se lo merece.

El Cádiz CF cayó con estrépito arrastrado por una secuencia de despropósitos. Alineación equivocada, alarmante falta de intensidad, sin conexión en los pases, escasas ocasiones de gol, sin acierto en los pocos remates que hizo, inconsistencia, errores defensivos de bulto...

Entre los múltiples factores que condujeron a la derrota, hubo uno que nunca se había dado desde el aterrizaje del actual entrenador. Tras su incorporación hace cerca de tres meses, el Cádiz CF dejó de perder gracias a la solidez que no habia tenido con Paco López.

Esa naciente robustez llevaba al conjunto amarillo a reducir el número de goles en contra. La decena de encuentros que enlazó sin derrota tuvo como denominador común el hecho de no ir nunca por debajo en el marcador. No verse por detrás le dio la confianza para ganar o empatar el peor de los casos, pero nunca perder.

Fue en Albacete cuando el Cádiz CF se topó con un contexto inédito desde la llegada de Garitano. El gol de Javier Martón en el minuto 65, que suponía el 1-0, puso al cuadro gaditano contra las cuerdas hasta ser noquedado sin piedad por un riva crecido. Era la primera que iba perdiendo con el nuevo técnico. Ese resultado desfavorable puso a prueba a un equipo que se hundió ante la adversidad. No fue capaz de reaccionar y se llevó un sonoro guantazo.

La derrota en tierras machegas fue todo un aviso. Cuando el Cádiz CF va por delante o impera la igualdad en el luminoso, no hay problema. Cuando va perdiendo, se viene abajo al quedarse sin capacidad de respuesta. Un problema que ya sufría con Paco López y que ahora sale a flote a las primeras de cambio con Garitano.

La clave está en no recibir gol primero, de lo contrario la derrota está casi asegurada al no mostrar recursos futbolísticos para replicar y para colmo ser cautivo de una fragilidad mental que ejerce de palanca de freno. El Cádiz CF cayó en su punto más débil y regresó de vacío de Albacete. Lo único que se trajo fue una lección de realidad.