La cifra clave en el descenso del Cádiz CF

El Cádiz CF trata de recomponerse después de haber recorrido una de las peores temporadas de su historia en Primera División. El descenso no fue una sorpresa. Todo lo contrario, se ganó el castigo a pulso fruto del negativo rendimiento (a nivel individual y colectivo) de una plantilla que no estuvo a la altura del objetivo de la permanencia. Después de cuatro campañas seguidas en la élite, el 19 de mayo de 2024 quedó grabada como la fecha de la caída a la división de plata.

La temporada 2023-24 comenzó con Sergio González en el banquillo, pero la mala dinámica de resultados derivó en un relevo que no causó el efecto deseado. Mauricio Pellegrino no consiguió enderezar el rumbo. El equipo amarillo logró 15 puntos en 21 jornadas con el primer técnico y 18 en 17 partidos con el segundo. En total, 33 que fueron insuficientes para conservar la plaza conquistada el 12 de julio de 2020.

Una de la claves del descenso está reflejada en el número de goles. El conjunto amarillo fue el menos anotador del campeonato con sólo 26 en 38 capítulos, con un promedio de 0,68 por encuentro. Se quedó sin ver puerta en casi la mitad de los partidos (18). Cuando se vio por debajo en el marcador, no fue capaz de remontar salvo en el choque en casa contra el Villarreal (de 0-1 a 3-1 con un rival con diez jugadores sobre el césped).

Con esa cifra de goles, escasa a todas luces, la salvación era una misión casi imposible. Una de las razones de su sequía anotadora radicó en las dificultades para generar oportunidades. De hecho, el Cádiz CF fue el equipo que sumó menos disparos a puerta. Hizo 123 (3,2 por partido), la mitad de los que realizó el Real Madrid, el que más tiró entre los palos con 249.

La pobre cifra de remates y la poca puntería condujeron al cuadro gaditano a un doloroso batacazo. No cabía otro desenlace que el descenso con esa trayectoria en la labor ofensiva.