La cuesta de enero se empina

Cádiz/El empate cosechado el pasado sábado en El Toralín ante la Ponferradina (0-0) confirma que la producción cadista se ha reducido drásticamente en los últimos tiempos, hasta tal punto que el equipo amarillo sólo ha sido capaz de sumar 5 de los últimos 15 puntos disputados, un registro que le sitúa a la altura de los peores equipos de la categoría.

Pese a que la igualdad de fuerzas existente esta temporada en Segunda permite al Cádiz mantener el liderato, lo cierto es que el evidente bache en forma de resultados tiene como consecuencia directa el acercamiento de su inmediato perseguidor, un Almería que se ha situado a cinco puntos. De hecho, el conjunto que dirige Guti ha amarrado el doble, 10, que los pupilos de Álvaro Cervera.

Los rojiblancos aparecen como la segunda escuadra con mejor racha, sólo superada por la UD Las Palmas, que en sus últimos cinco compromisos ha conquistado 11 puntos que le han catapultado hasta la zona de fase de ascenso a Primera, en la sexta plaza. También con 10 figura el Zaragoza, que en su caso computa las últimas cinco jornadas de la primera vuelta porque su encuentro con el Sporting de Gijón que abría el año fue aplazado a este martes.

Por detrás de canarios, almerienses y maños, con 8 puntos sumados de los últimos 15, Elche, Mirandés, Ponferradina, los tres en puestos medio-altos de la tabla, y el Oviedo, que sigue peleando por alejarse de las posiciones de descenso a Segunda B.

Con 7 puntos en los últimos cinco duelos, siete equipos, tres de mitad de clasificación hacia arriba, el Huesca, el Fuenlabrada y el Numancia, y cuatro de mitad de tabla hacia abajo, el Rayo Vallecano, el Sporting de Gijón, el Málaga y el colista Deportivo de La Coruña.

Sólo el Extremadura, que en estos momentos ocupa el primer puesto que conduce a la categoría de bronce, ha atado 6 puntos de 15, igual que el titular de la Tacita de Plata es el único con 5 de 15, en el puesto 16º de esta particular clasificación.

La indiscutible realidad de que los marcadores más recientes de los gaditanos no se hallan a la altura de lo que vienen haciendo este curso, y tampoco al nivel de los aspirantes a los puestos de honor, queda claramente de manifiesto al comprobar que con menos producción sólo figuran seis conjuntos , los seis de la mitad hacia abajo de la clasificación: Girona y Tenerife, con 4 de 15; Alcorcón y Racing de Santander, con 3 de 15, y Albacete y Lugo, con 2 de 15.

Visto lo visto, el Cádiz está obligado a empezar a sumar de tres en tres si quiere conservar su privilegiada posición. Obviamente, antes que haber sufrido derrotas como las encajadas en el Carlos Belmonte de Albacete, el Fernando Torres de Fuenlabrada o en el Ramón de Carranza contra el Numancia, en las que se pudieron salvar los muebles, siempre habría sido mejor firmar las tablas. Pero las igualadas tienen el inconveniente de que acaban pasando factura si se encadenan con asiduidad.

La experiencia de lo sucedido las anteriores dos campañas, en las que a la hora de la verdad tantos empates, al margen de algunas derrotas, impidieron acceder al play-off, debería servir como una referencia más que vida. El puntito a puntito se antoja suficiente para alcanzar el objetivo de la salvación, con Cervera consumada con suficiencia en todos los casos, pero cuando se trata de aspirar a más, no queda otra que ser ambicioso.

Así las cosas, la cuesta de enero aparece más empinada que nunca no ya por la entidad de los contendientes, que también, sino por la necesidad de retomar la senda perdida. Tras la cita de la segunda eliminatoria de la Copa del Rey en Logroño, el próximo sábado, aguardan el Mirandés, en Carranza el miércoles día 15; el Deportivo, en Riazor el domingo 19, y el Racing, en Cádiz para cerrar el mes. Volver a ganar en casa, lo que no se hace desde que el 24 de noviembre se dio buena cuenta del Lugo (2-1), quizás representaría la base de la recuperación deseada y con toda seguridad supondría una magnífica rampa de lanzamiento para afrontar con optimismo la segunda parte del campeonato.