"Había días que pensaba que no iba a jugar más"

El final de la campaña 2009-2010, que está a la vuelta de la esquina, provoca que inevitablemente se hable de lo sucedido desde que a finales de agosto arrancó la presente temporada. Ayer lo hizo Diego Tristán, que como si se tratara casi de una confesión recordó los malos momentos vividos en lo personal, lo que le llevó a decir que "había días que pensaba que no iba a jugar más".

El delantero fue ayer el protagonista en la sala de prensa de El Rosal. Todo ello a pocos días del encuentro clave del próximo domingo, en el que confía participar a pesar de sus leves molestias. "Tengo ganas de jugar y de estar ahí, eso no me lo va a quitar nadie. Tengo intención de entrenar ya con el grupo y si me tienen que quitar que sea el entrenador, porque por mí no va a quedar".

El ariete de La Algaba cree que la situación del equipo obliga a ser optimista, lo que explica realizando la siguiente reflexión: "Si echamos la vista atrás y nos dicen hace tres meses que a estas alturas íbamos a estar ahí, lo hubiéramos firmado", agregando que "en casa estamos bien y al Murcia lo podemos dejar a cuatro puntos; fuera de casa todo lo que sea puntuar se puede dar, pero la permanencia pasa por casa y los puntos que debemos sumar pasan por Carranza". "Lo primordial es seguir en la misma línea".

Tristán no es partidario de estar haciendo las cuentas de la lechera, si bien respeta al que las haga. "El vestuario ni nadie debe hacer cuentas porque hay que ir partido a partido y lo primero es el Murcia. Luego se verá el siguiente". Del mismo modo, admitió que la delantera está dando buen resultado con su presencia y la de Ogbeche, aunque también tuvo palabras para Toedtli. "Barto (Ogbeche) y yo nos encontramos bien juntos, igual que con Mariano (Toedtli). Jugar con dos referencias arriba se nota y se está respondiendo ante la ausencia de Mariano. Mi trabajo ahora es que al entrenador le cueste la vida quitarme", asevera demostrando que confía más que nunca en sus posibilidades.

La parte más profunda de su intervención le llevó a hablar de la campaña que está a punto de concluir, en cuyo tramo final su equipo se está jugando mucho. "No es la temporada que todos queríamos. Cuando llegué al Cádiz dije que necesitaba continuidad. Ahora, en momentos importantes, he tenido la oportunidad y ojalá mis números sirvan para ayudar al equipo". Cuando se le preguntó si llegó a temer lo peor cuando se vio relegado de la convocatoria antes de jugar en Vigo, Tristán fue muy sincero: "Había días que pensaba que no iba a jugar más. Era algo que se me ha pasado por la cabeza porque dejaba de ser un jugador importante. Pero también sabía a lo que venía a Cádiz y esa ilusión es la que me trajo aquí y le me ha ayudado a aguantar", concluye.