Las nuevas normas arbitrales que el Cádiz CF debe conocer antes de empezar la Liga
El conjunto amarillo tiene que adaptarse a los criterios que se aplicarán en la temporada 2023-24
Las incógnitas de la primera alineación del Cádiz CF
Cádiz/El Cádiz CF alza el telón de la temporada 2023-24 con el reto de la salvación como es costumbre desde su regreso a la máxima categoría en 2020. El primer compromiso lo afronta el lunes 14 de agosto contra el Deportivo Alavés en el estadio Nuevo Mirandilla.
Los jugadores tendrán que dar lo máximo para esquivar los tres últimos puestos en un torneo de elevada exigencia y deberán adaptarse desde el primer momento a las nuevas normas arbitrales que marcarán el desarrollo de los partidos.
La preparación de la plantilla no afecta sólo al plano físico y a la estrategia. Es obligación del cuerpo técnico y los futbolistas conocer con exactitud las novedades en la toma decisión de los jueces.
El Comité Técnico de Árbitros (CTA), con su presidente a la cabeza, Luis Medina Cantalejo, explicó días pasados los cambios que se encontrarán los equipos este curso. Además, los árbitros se reunieron con los entrenadores a los que explicaron las modificaciones previstas y escucharon sus sugerencias. Los colegiados pidieron su colaboración para el buen avance de la competición.
"La pasada temporada es mejorable en lo que se refiere al colectivo arbitral". Medina Cantalejo no eludió la autocrítica antes de explicar las novedades.
Uno de los cambios afecta al vídeo arbitraje. La idea es que el árbitro de campo tenga más autonomía y haya menos intervencionismo por parte del VAR, que seguirá actuando aunque a priori en menor proporción.
"Si el VAR interviene mucho es que algo pasa", señaló el máximo responsable del CTA, que apuesta por que los colegiados que están sobre el terreno de juego "tengan mayor capacidad para tomas decisiones".
El director del proyecto del VAR, Carlos Clos Gómez, lo apuntó con claridad: "Necesitamos que haya menos intervenciones del VAR, que no no haya tantas intervenciones para hacer justicia". En resumen, más autoridad para el colegiado y menos para el VAR.
Otro criterio novedoso en la nueva campaña será no castigar con cartulina amarilla las manos en el área que bloqueen disparos pero que no se traduzcan en expulsión o sean una ocasión manifiesta de gol.
Algo más de suma relevancia. El colectivo arbitral anuncia que no se pitarán penaltis por contactos de baja intensidad dentro del área. Es decir, supuesto adiós a los penaltitos.
Uno de los aspectos importantes es el objetivo que se juegue el máximo tiempo posible en cada partido. Es decir, que se tendrán muy en cuenta las pérdidas de tiempo y será habitual que los partidos se vayan más allá de los 100 minutos entre las prolongaciones de la primera y la segunda mitad.
En este contexto de aprovechamiento del tiempo, se añadirá un minuto de juego por cada gol (más allá del tiempo que se emplee en la revisión). La medida tiene como soporte un estudio que refleja que un minuto es la media de tiempo que se pierde en la celebración de cada tanto.
Por último, los árbitros pretenden ser más rigurosos a la hora de castigar las jugadas que pongan en peligro la integridad física de los futbolistas.
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