Un pulso intenso en el centro de la defensa del Cádiz CF

El Cádiz CF tiene abierto el centro de la defensa como consecuencia del rendimiento que viene ofreciendo Bojan Kovacevic, quien contra todo pronóstico al ser un jugador muy joven (20 años) y desconocido está despertando elogios generalizados por su madurez y rendimiento en el rectángulo de juego.

Una vez cerrado el mercado invernal y con la salida de Glauder, el fichaje de Iker Recio y el alta de Luis Hernández, todo apuntaba a una dupla con Víctor Chust y Fali por aquello de experiencia, veteranía y años juntos en el proyecto del Cádiz CF. Sin embargo se ha ido haciendo fuerte el que menos se esperaba y el guión previsto no se está cumpliendo. Kovacevic suma ya la cifra nada despreciable de 16 partidos -13 de ellos como titular- en un total de 1.271 minutos, y el cadismo está satisfecho con las condiciones del serbio.

Inteligente como él solo para no complicarse la vida, habitualmente mantiene la posición y Chust le aporta el equilibrio que necesita para que el centro de la zaga funcione. Kovacevic está teniendo una buena adaptación al fútbol español en su primera experiencia lejos de su país.

La cuestión es que las jornadas siguen pasando y a las puertas del tramo final de la temporada, queda por ver quién gana el pulso en esa lucha entre Kovacevic y Fali.

Lo del valenciano tiene su parte deportiva y la extradeportiva. No son buenos tiempos sobre el verde a pesar de acumular más partidos y minutos que el serbio; su rendimiento queda lejos de otras campañas por diversas causas y es algo que la grada nota porque suena un runrún con sus errores que es sinónimo de desconfianza.

El otro tema que pesa sobre Fali es aquella imagen crítica con su propia afición en el Cádiz-Oviedo, cuando después de marcar el equipo amarillo se dirigió a la afición desde la grada -no jugó aquel encuentro- gritando “¡ahora no decís nada!”, mientras mostraba cara de pocos amigos.

Aquello fue considerado una grave falta de respeto de Fali a la afición del Cádiz CF, con el equipo hundido en la tabla, que no todos han perdonado y que sigue pesando sobre la cabeza del valenciano en su estrecha pelea por la titularidad con Kovacevic.