Otro rival de cuidado para el Cádiz CF

Cádiz/El Cádiz CF da los últimos pasos de la primera vuelta de la Liga inmerso en el tramo del calendario más complicado de la temporada, con una serie de compromisos seguidos contra los adversarios más poderosos. Si la semana pasada tuteó al Málaga -derrota por la mínima en La Rosaleda-, el rival que maneja el presupuesto más alto para la plantilla en la categoría de plata (25,2 millones de euros), sin respiro le toca medirse a otro recién descendido, el Deportivo de La Coruña, que con 18,5 millones dispone del tercer tope salarial más elevado -el segundo es el de Las Palmas con 19,2 millones-.

Los enfrentamientos contra los adversarios más potentes le llegan al Cádiz CF en su momento más dulce, en plena batalla por la defensa de la sexta posición a la que se encaramó en la 17ª jornada y que conserva después del desarrollo de la 18ª pese a caer en territorio costasoleño.

El conjunto entrenado por Álvaro Cervera depende de sí mismo para mantenerse en la actual plaza de privilegio al cierre de 2018. Para no quedar en manos de lo rivales directos -en especial el Osasuna, con el que está empatado a 29 puntos en la tabla-, no le queda otra que doblegar al Dépor en el estadio Carranza el próximo sábado desde las nueve menos cuarto de la noche.

La misión es de lo más compleja. La escuadra gallega presenta unos números que meten miedo a cualquiera. Hasta la fecha cumple de sobra con el papel de favorito al ascenso a Primera División con el que partía antes del comienzo de la temporada. Ocupa el segundo puesto en la clasificación con 35 puntos -seis más que los amarillos-, a sólo dos del líder, el Granada.

El Dépor es el equipo que menos derrotas acumula en el campeonato. Es muy difícil sumar los tres puntos ante un contendiente que sólo ha perdido una vez cuando restan tres envites para el cierre de la primera vuelta. Cayó 1-0 en el campo del Alcorcón -la revelación del torneo- en la quinta jornada y desde entonces encadena nada menos que 13 encuentros consecutivos sin probar el amargo sabor de la derrota. Tres meses sin un varapalo.

No hay otro equipo que lleve tanto tiempo sin perder. Ni siquiera el Cádiz, que extendió su racha hasta ocho partidos -un empate y siete victorias seguidas-. El equipo amarillo afronta el desafío de acabar con la dinámica positiva de uno de los cocos de la Segunda División A.

El cuadro coruñés es el equipo más goleador de la Liga. Acumula 31 tantos, lo que supone un promedio de 1,7 por partido. Es el único que ha alcanzado y superado la treintena, lo que da una idea del enorme poderío que atesora en ataque.

La media anotadora del Cádiz CF, que lleva 24 dianas, es de 1,3. Es raro que los blanquiazules se vayan de un partido sin marcar. Acertaron en 16 de los choques ya disputados. Sólo dejaron de perforar la portería contraria en dos duelos como visitantes ante el Alcorcón y el Rayo Majadahonda (0-0).

El Dépor no sólo es eficiente en ataque. Destaca además por su sólido sistema defensivo que le lleva a ser el tercer equipo menos goleado con una cuenta de 13 tantos en contra -dos menos que el conjunto de Cervera-, con un promedio de 0,7. Sólo el Alcorcón (11) y el Granada (12) reciben menos goles que los gallegos.

El equipo entrenado por Natxo González es el que presenta el mejor balance resultante de los goles marcador y los recibidos, con una cuenta positiva de 18, el doble del saldo del Cádiz, establecido en nueve.

El Deportivo llegará al Carranza con el aval de ser el tercer mejor visitante del torneo con los 12 puntos que acredita fuera de casa, cinco menos que el Granada y el Albacete. Eso sí, su producción se sustenta sobre todo en los empates: seis frente a un par de triunfos y la conocida única derrota. Ganó en el terreno dos de rivales de la zona baja: el Nástic de Tarragona (1-3 en la séptima jornada) y el Extremadura (0-1 en la segunda).