La segunda mini Liga de Cervera
Cádiz CF
El entrenador afronta una recta final de 11 partidos como si fuese una nueva temporada cuatro años después de los 10 que dirigió en el ascenso a Segunda A
Cádiz/La Liga se resiste a llegar pero tarde o temprano habrá fútbol si nada se tuerce en las tres semanas venideras, con el Cádiz CF con un rol destacado como líder de Segunda División A. Si se cumplen las previsiones, la competición oficial se reanudará a mediados del próximo mes de junio con once jornadas por delante en las que se resolverá la temporada más larga y atípica en la historia del fútbol. El coronavirus lo condiciona todo en los últimos meses y, en el caso del balompié, provoca un retraso que no será irreparable si al final es posible terminar el campeonato.
El Cádiz CF, líder a lo largo de todo el curso (27 de las 31 jornadas), afronta la tentativa del ascenso a Primera División de la mano de su entrenador, Álvaro Cervera. El técnico prepara con sus jugadores el pequeño torneo en la que se convierten las once citas pendientes.
Es como si empezase una nueva temporada que será muy corta e intensa y con el conjunto amarillo situado en una posición privilegio gracias a la media docena de puntos de renta que ostenta en la zona de ascenso directo, la que mantiene sobre el Almería y el Huesca (tercero y cuarto en la clasificación). Son 56 los que acredita el líder frente a los 50 de sus perseguidores más cercanos en esa pelea por escalar a la gloria. El Real Zaragoza ocupa el segundo puesto con 55.
Para el técnico supone la segunda mini Liga que encara desde su aterrizaje en el Cádiz CF en el tramo final de la campaña 2015/16. Ese curso, en la oscuridad de la Segunda División B, se hizo cargo de un equipo amarillo envuelto en una maraña de dudas. Llevó el mando durante diez partidos que fueron suficientes para abandonar el escalón de bronce y dar el salto al circuito profesional.
El balance de aquella decena de encuentros en la frenética recta definitiva fue de seis victorias, dos empates y un par de derrotas. El saldo de entonces le podría servir ahora al Cádiz CF, que en ese caso sumaría 20 puntos más, se elevaría los 76 y pondría el listón muy alto a sus rivales directos.
Cervera afrontó a su llegada cuatro choques de Liga y seis del aquel play-off inmaculado. El equipo perdió 0-1 ante el Mérida en el estreno del técnico, empató (0-0) en Jumilla y cayó de nuevo en casa (0-2 ante el UCAM Murcia). Mientras, el entrenador inculcaba sus conceptos a la plantilla en una carrera contra el tiempo para presentarse a las eliminatorias como el bloque compacto que luego demostró ser a la hora de la verdad.
El entrenador supo guiar a los jugadores en aquellos partidos decisivos y ahora tiene otro reto por delante en las once finales que jugará el Cádiz CF en apenas mes y medio entre junio y julio.
Las circunstancias son adversas tras el largo periodo de dos meses si la normal actividad diaria. Cervera supo sacar jugo al plantel hace cuatro años y ahora pretende hacer lo mismo en un auténtico desafío en busca del éxito absoluto que supondría el ascenso a la élite del balompié español. La filosofía no ha cambiado: la lucha no se negocia con el principio del trabajo defensivo por encima de todo lo demás.
El Cádiz CF actuará como local en seis de esos enfrentamientos: ante el Rayo Vallecano, Alcorcón, Tenerife, Real Oviedo, Fuenlabrada y Albacete. Y ejercerá de visitante en cinco duelos: frente al Numancia, Huesca, Elche, Extremadura y Girona.
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