Serbia pone sus ojos en el Cádiz CF

Con 20 años, poca experiencia y un desconocimiento absoluto del fútbol español, el refuerzo de Bojan Kovacevic el pasado verano era un mensaje inquietante en el Cádiz CF. Una demarcación como la defensa se apuntalaba con un central que no conocía nadie; las cosas casi habituales del club gaditano. Sin embargo, después de las diez primeras jornadas viendo pasar la vida fuera del césped en partido oficial, la llegada de este jugador al once es, por el momento, para quedarse.

Víctor Chust, Fali, Glauder... incluso el lesionado Luis Hernández -sin licencia para jugar- empezaron la competición en una posición de mayor protagonismo que el desconocido Kovacevic, quien a sus 20 años ha ido tapando bocas haciendo lo correcto, sin exquisiteces pero sin complicarse. Con un nivel bajo en la demarcación, el más joven de la 'clase' está siendo el mejor o el más listo.

Cuando desde Serbia tuvieron conocimiento que uno de sus jóvenes valores, formado entre el Partizán y el Cukaricki, se lanzaba a por la aventura española, las miradas han sido habituales a la Segunda División para conocer la respuesta del jugador en un aspirante al ascenso a la máxima categoría.

Después de unas primeras diez jornadas de desencanto, la esperanza de poder ver a Kovacevic con cierta asiduidad en el Cádiz CF se iba diluyendo porque en ese periodo Paco López no pasó de tenerle en el banquillo. El preparador valenciano insistía con repartir las dos plazas del centro de la zaga entre Chust, Fali y Glauder, a pesar de que el rendimiento de todos ellos dejaba mucho que desear.

Antes de acudir a Eibar, el cuerpo técnico del equipo amarillo por fin abrió la puerta al serbio. Su estreno llegó con derrota en Ipurua (1-0), pero el central estuvo a buena altura y empezó a demostrar que no complicarse y ser contundente puede ser una buena elección en su puesto.

Algo bueno vería Paco López para decidir que las siguientes cuatro jornadas continuase entre los elegidos para ser finalmente fijo en el centro de la defensa. Junto a Fali o Víctor Chust, Kovacevic se hace fuerte en el once para sorpresa de casi todos.

Lejos de España, en su Serbia natal, los principales medios de comunicación deportivos se hacen eco del papel del cadista, que a sus 20 años se va haciendo con un nombre en una categoría tan fuerte y exigente como es la Segunda División. Va ganando en confianza, cumple a buena velocidad el proceso de adaptación por aquello del idioma y, lo más importante, aporta argumentos para que Paco López mantenga la confianza en él.

A su edad y con los números que empieza a acumular, los serbios se muestran algo sorprendidos y albergan muchas esperanzas de futuro con Bojan Kovacevic, un central para largo plazo que se hace fuerte en España defendiendo el escudo del Cádiz CF.