El Cádiz pone en marcha la transformación de El Rosal

Cádiz CF

El club ha iniciado las obras para colocar una grada supletoria en el campo Ramón Blanco.

El nuevo aforo para los partidos del Cádiz B se puede aproximar a los 1.700 espectadores.

A la izquierda de la imagen se puede comprobar la pared de tierra y grava que se está levantando detrás de una de las porterías del campo Ramón Blanco.
A la izquierda, la pared que se está levantando detrás de la portería sur del Ramón Blanco.
F. J. Díaz

05 de agosto 2019 - 06:00

Cádiz/Las instalaciones deportivas de El Rosal van a empezar a cambiar su aspecto con motivo del ascenso del Cádiz B, que esta temporada competirá por primera vez en su historia en Segunda División B. Como la decisión del club es que afronte los partidos como local en su ciudad deportiva, es obligado afrontar unos trabajos para que el campo principal del recinto, denominado Ramón Blanco, aumente su aforo.

Cuando el pasado 30 de junio el filial amarillo tumbó al Unión Viera y entonó el alirón como nuevo equipo de la categoría de bronce, los dirigentes cadistas sabían que había que rascarse el bolsillo si la idea era que el conjunto de Juanma Pavón siguiera jugando en El Rosal. El principal problema afecta a la falta de aforo, ya que la única grada del Ramón Blanco da cabida a unos 960 espectadores, lo que unido a las personas que se colocan de pie detrás de la portería norte de este campo -junto al bar- eleva la cifra a unos 1.100.

El club gaditano sabe que la cantidad es insuficiente para el estreno del Cádiz B en el grupo IV de Segunda B, donde le esperan rivales de la talla del Córdoba, Recreativo de Huelva, Cartagena, UCAM, Real Murcia -primer rival en Liga- y los gaditanos San Fernando, Atlético Sanluqueño, Balona y Algeciras. Muchos partidos que, a priori, arrastrarán a bastantes aficionados cadistas y visitantes, por lo que es obligado ampliar la capacidad de este feudo.

Los trabajos ya han comenzado y por el momento están consistiendo en el relleno de la zona trasera de la portería sur -la que está más cerca de la puerta de acceso a la ciudad deportiva-, que es donde se pretende ganar espacio en forma de metros a lo ancho y a lo largo para que se pueda colocar una grada supletoria.

Ese espacio no cuenta con las dimensiones adecuadas para que sirva de base para una estructura pesada que, a su vez, debe soportar a un buen número de espectadores. Es por ello que los trabajos iniciales, tras el estudio del terreno, están afectado a la carga de arena y grava para dar cuerpo y compactación a todo ese lugar que se ganará junto al terreno de juego principal de las instalaciones. En breve tocará el turno a la fase de hormigonado.

Es apreciable desde la zona de aparcamiento un cúmulo de grava sobre el que actúa una pala que procede al llenado de los camiones que la trasladan para su posterior vaciado y reparto en el nuevo terreno sobre el que irá la grada que se va a instalar.

La Liga arranca el fin de semana del 24-25

A falta de tres semanas para que arranque la competición en el grupo IV de Segunda B, el club sabe que para el fin de semana del 24-25 de agosto deben estar los trabajos a punto porque comienza la Liga con un Cádiz B-Real Murcia, que a buen seguro será un reclamo importante para los cadistas e incluso para aquellos aficionados murcianistas que se encuentren de vacaciones.

La estructura que será montada detrás de la portería sur del campo Ramón Blanco tendrá capacidad, en un principio, para unos 500 ó 600 espectadores, por lo que de alguna manera puede aliviar algo el escaso aforo existente hasta ahora. No obstante, cuando lleguen los duelos provinciales y encuentros contra gallitos del grupo, la capacidad se quedará pequeña ante la demanda que despertarán esos partidos.

Los trabajos están siendo supervisados por Santiago Pozas, director general del Cádiz, quien precisamente en la mañana del pasado viernes estuvo a pie de obra en la zona que va de la grada ya existente a la portería sur, que es donde están interviniendo los operarios.

Claves de los trabajos en la ciudad deportiva cadista

El nuevo graderío supondrá un pequeño alivio ante la demanda que levantará que el filial compita en Segunda División B. Todo apunta que el nuevo aforo rondará los 1.700 espectadores, aunque la capacidad final podría variar algo. Hay que tener presente que los trabajos deben estar acabados el próximo día 23, ya que el fin de semana del 24-25 comienza la Liga y el conjunto de Juanma Pavón recibirá al histórico Real Murcia. Para el Cádiz B será una temporada muy atractiva, ya que tendrá que hacer frente a ocho derbis provinciales (cuatro de ellos como local), así como la presencia en El Rosal del Córdoba, Recreativo de Huelva, Real Murcia, UCAM o Cartagena, como equipos más punteros. Por último, Santiago Pozas, director general de la entidad cadista, es el responsable en supervisar el día a día de la obra en El Rosal. De hecho en la mañana del pasado viernes se dejó ver por el recinto junto a los operarios que ejecutan y controlan los trabajos.

stats