Las urgencias de Las Palmas frente al Cádiz CF

Cádiz/La Unión Deportiva Las Palmas recibe al Cádiz CF (sábado 8 de febrero a partir de las seis y cuarto de la tarde) arrastrado por una dinámica negativa que se extiende a seis encuentros consecutivos sin ganar.

El conjunto canario forma parte del grupo de cinco escuadras que aún no conoce la victoria en los caminos paralelos de la segunda vuelta y el año 2020. Son el Mirandés, Racing de Santander, Fuenlabrada y Albacete Balompié, además de Las Palmas. Los isleños llevan tres puntos de los 15 que han disputado en el segundo periodo del campeonato.

Los insulares viven un momento complicado en mitad de la clasificación cuando su objetivo no es otro que el ascenso a Primera División a tenor de las cifras que maneja para la plantilla. Con 12,2 millones de euros, dispone del quinto límite salarial más elevado de la categoría de plata. Son tres millones más que el Cádiz.

El equipo que entrena Pepe Mel sufre un atasco en la décima posición con una cuenta 35 puntos, aunque no transita lejos de la zona noble. Está a sólo tres puntos del sexto peldaño (a 14 del líder) y su opciones pasan por hallar un hueco en el play-off.

El recorrido más reciente de los grancanarios refleja una tendencia negativa aunque con marcadores apretados que dan una idea de la dificultad que entraña medirse a un rival que atesora calidad en sus filas. Cayeron 2-1 en La Coruña el pasado fin de semana, empataron sin goles en casa ante el Tenerife, igualaron a uno en el terreno del Racing de Santander, perdieron (0-1) en la isla frente al Real Zaragoza, firmaron una equis (0-0) en Fuenlabrada y tablas (1-1) como local ante el Rayo Vallecano.

Para encontrar el triunfo de Las Palmas más próximo en el tiempo hay que remontarse al pasado 15 diciembre de 2019, en la vigésima jornada de Liga, cuando se impuso 2-3 en el estadio del Elche. Una semana antes se produjo su última victoria como anfitrión, cuando se deshizo 3-1 del Numancia.

El sábado frente al equipo de Álvaro Cervera se cumplirán dos meses de aquel triunfo en presencia de su afición. Estaba entonces el conjunto de Pepe Mel inmerso en plena vorágine ganadora que le llevó a encadenar un póquer se éxitos seguidos. Pasa de una excelente racha a media docena de duelos sin una alegría completa.