La vuelta de Manu Vallejo a Cádiz
El chiclanero pisará con la camiseta del Valencia el estadio en el que dio su mejor versión, siendo un canterano, en la campaña 2018-19
Cádiz/Si no sucede nada extraño, el Domingo de Resurrección se producirá en el Ramón de Carranza el regreso de Manu Vallejo. La vuelta del último canterano que explotó futbolísticamente al nivel exigible para que un grande -en horas bajas- como el Valencia acudiera a por su fichaje. El próximo rival del Cádiz CF trae ese aliciente al feudo gaditano, un jugador querido que dejó un grato sabor de boca desde su etapa formativa en la cantera.
No será una vuelta más. Se trata de un chiclanero que entusiasmó de amarillo desde que era cadete y que pudo abrir puertas dentro del club sin que un grande le vendiera historias de grandeza para que cambiara de aires siendo un niño. Manu pasó por los cadetes y los juveniles antes de llegar al Cádiz B, donde definitivamente abrió el tarro de las esencias formando una dupla bestial con su entrenador, Mere Hermoso. El técnico portuense fue el que mejor entendió al atacante y uno de los grandes responsables de que diera el salto al primer equipo.
Precisamente en una entrevista concedida a Diario de Cádiz,Diario de Cádiz en diciembre de 2018, Manu Vallejo se desprendió en elogios hacia Mere y sus ayudantes, en aquel entonces, en el Cádiz B. "Mere me cogió en una edad muy buena para corregir cosas que no estaba haciendo bien o a las que no les daba tanta importancia. Él y su cuerpo técnico están totalmente preparados para llevar a cualquier futbolista a la élite. Miguel Chamorro, como preparador físico, me ayudó en todo y estuvo un verano tratando de lograr lo mejor de mí. Y qué voy a decir de Raúl López, más cadismo que él, nadie. Me han enseñado todos muchísimos y ellos tienen mucha culpa de que yo esté ahora mismo en el primer equipo del Cádiz. Mucha culpa de donde estoy y lo que soy la tiene Mere".
Este chiclanero, que acaba de cumplir 24 años, tiene la educación y coherencia de un hogar futbolero gracias a su padre, Javi Vallejo, recordado futbolista del Chiclana CF y el San Fernando. Y también la influencia de una escuela como la del Sancti Petri, cuna de buenos jugadores y personas con los mejores valores que puede tener un deportista. Con seis años, Manu Vallejo entró en esa escuela que abandonó siendo cadete para seguir creciendo y formándose en el Cádiz CF. Tiene el sello del Sancti Petri y la pasión del Cádiz CF.
Cumple en el Valencia su segunda temporada cargando con ese papel de revulsivo que ya parece injusto. Con menos oportunidades y minutos que los titulares, el gaditano lleva este curso seis goles desde aquel doblete al Levante, en la primera jornada, cuando salió al campo a falta de 18 minutos para el final. Entonces se escuchaban cantos de sirena de una posible cesión al Cádiz CF. Ha marcado también contra el Alavés, el Athletic de Bilbao y el Celta, en la Liga, y al Alcorcón en la Copa del Rey. Parece injusto su papel de revulsivo cuando Máxi Gómez, el titular en su puesto, ha jugado el doble de minutos y ha gozado más de doble de titularidades, y lleva un gol menos que Manu, cinco, por lo que quizás Javi Gracia no está siendo demasiado justo con el ex cadista.
Manu Vallejo guarda silencio y espera su oportunidad. Sus mandamientos siempre han sido correr y pelear más que el contrario. Con ese trabajo, él se va contento aunque no haga gol. Todo ello porque su ADN parte del sacrificio y a él, como a su padre hace varias décadas, nadie les ha regalado nada. En el Cádiz CF, el atacante chiclanero convenció a Álvaro Cervera con ese esfuerzo y con goles a pesar de contar entonces con 21 años. Y es que el más joven era un ejemplo para todos. Manu tiene un buen concepto del técnico del equipo amarillo. "Es exigente y muy ambicioso porque al final es lo que le puede llevar al éxito. Tiene sus ideas y le dan resultado. Ha dado con un equipo en el que puede llevar a cabo sus ideas como es este Cádiz. Lleva tres o cuatro años y saca al equipo el máximo provecho y rendimiento. Es un entrenador que no deja que te relajes porque llegas al partido y no sabes si vas a jugar. De esta manera tiene a todo el mundo metido y enchufado", indicaba en el ocaso de 2018. No se equivocó con lo de "es lo que al final le puede llevar al éxito". Le llevó a Primera.
El valencianista se prepara para las sensaciones que tendrá al pisar por primera vez el Ramón de Carranza con otra camiseta, otras sensaciones, desde que se marchó para crecer como futbolista. No estará una afición que a buen seguro le hubiera recibido con cariño y respeto, el que él se ganó con su comportamiento y aportación con el escudo del Cádiz CF en el pecho. Vuelve Manu Vallejo, no para quedarse, pero sí para que se pueda recordar y reconocer como merece el ciclo de la última gran 'perla' de la cantera que fue capaz de llegar a la élite tras escalar peldaños en ese sueño de niños en las instalaciones de El Rosal.
También te puede interesar
Lo último