Los secretos del templo del Carnaval en Cádiz: el Gran Teatro Falla

Interior del Gran Teatro Falla
Interior del Gran Teatro Falla / Román Ríos

El COAC ya ha comenzado y las tablas del Gran Teatro Falla ya vibran con las letras del Carnaval. Durante estos días, el templo de los ladrillitos coloraos volverá a ser el escenario perfecto y el centro neurálgico de esta festividad. Hasta 145 agrupaciones harán vibrar las tablas del Gran Teatro Falla y si has conseguido entrada para ver alguna de ellas seguro que te interesará conocer algunas curiosidades de este coliseo gaditano.

Al Carnaval no solo se le reza en sus calles, el Gran Teatro Falla es icono para los gaditanos y un lugar de culto para disfrutar de las chirigotas, coros, cuartetos y comparsas. Este templo se alza en la plaza Fragela y alrededor de él podrás encontrar grabadas en el suelo las estrellas de algunos autores más icónicos del Carnaval de Cádiz. Esta especie de paseo de la fama de Hollywood a lo gaditano despierta la curiosidad de los amantes del Carnaval y se fotografían con ellas.

Este templo del arte cuenta con más de 100 años de existencia y, como dato curioso, deberás saber que se alza sobre el lugar donde se encontraba el Gran Teatro de Cádiz del siglo XIX, el cual sufrió un incendio y se destruyó. Por este motivo, se construyó un nuevo teatro, el que conocemos en la actualidad, y que se inauguró en 1910.

Otra de las curiosidades que deberás saber sobre este emblema de la ciudad es que le debe su nombre a Manuel de Falla, compositor gaditano exponente de la música española del siglo XX. De hecho, cada uno de los camerinos del Gran Teatro Falla lleva el nombre de las obras de este compositor.

En estos días, si tienes entrada para ver el COAC, podrás disfrutar de la belleza de este asombroso teatro que cuenta con una capacidad de 1.214 espectadores, repartidos entre butacas, palcos, anfiteatro y zona del gallinero (‘el paraíso’). En cuanto a sus entrañas, bajo el escenario donde tienen lugar las funciones de las agrupaciones carnavalescas se encuentra un espacio desconocido para muchos, el pozo de mareas. Este espacio, que no está abierto el público por motivos de seguridad, podría ser la razón de la buena acústica con la que cuenta el Gran Teatro Falla.

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