Mirador El Cintillo y Aguas Nuevas, un balcón hacia la Sierra de Grazalema

Si bajas desde Villaluenga del Rosario hasta Benaocaz debes hacer una parada obligatoria en uno de los puntos estratégicos de esta zona. A mano derecha de la carretera se encuentra el Mirador El Cintillo y Aguas Nuevas, un lugar mágico y de gran belleza desde donde podrás asomarte para contemplar las vistas más maravillosas del suroeste del Parque Natural Sierra de Grazalema.

Entre encinas y acebuches se encuentra la falda de la Manga de Villaluenga, un lugar único desde donde podrás divisar los encantos de algunos de los enclaves naturales de la Sierra de Grazalema. Algunos recomiendan visitar este enclave durante el atardecer ya que la sierra de gaditana se transforma en un auténtico espectáculo en ese momento del día. Además, al haber una zona de descanso puedes tomarte todo el tiempo que quieras para disfrutar de las vistas.

Este enclave está señalizado y podrás leer el panel informativo que indica los intereses paisajísticos que podrás contemplar desde este punto. Según informa el panel, desde este estratégico mirador podrás disfrutar de una preciosa vista del suroeste del Parque Natural Sierra de Grazalema, cuyo paisaje de grandes contrastes está influenciado por el régimen de lluvias y por el carácter calizo de sus suelos.

Según muestra la imagen del panel informativo situado en este mirador, de izquierda a derecha podrás divisar en el horizonte la Sierra del Juncoso, Fuente de Fátima, Cerro del Torero, la Sierra de la Silla donde destaca las ruinas de Ocuri, Ladera del Pavo, Pico del Adrión, "El Esparragal" y Monte Higuerón de Tavizna, donde abundan los algarrobos. El espectáculo paisajístico continúa en el horizonte con la sierra de Bornos, Loma de Albarracín, la Sierra Alta a 899 metros, Cerro Verdugo y Los Castillejos y Aguas Nuevas.

Estos enclaves naturales son los que conforman el paisaje que podrás disfrutar desde el Mirador El Cintillo y Aguas Nuevas. Mientras que, a nuestros pies, según puede leerse en el panel informativo, transcurre una calzada romana que deja muestra de la presencia del hombre en estos parajes desde el principio de los tiempos, así como un lugar estratégico para las comunicaciones entre las poblaciones.

En cuanto al paraje natural, el corazón verde la Sierra de Grazalema alberga en su interior una rica avifauna que te sorprenderá. Entre las especies que habitan en este mágico lugar se encuentran el cernícalo común, collalba negra, grajilla, buitre leonado o el halcón peregrino, entre otras. Sin lugar a dudas, esta zona de la serranía gaditana alberga una gran riqueza no solo en sus espectaculares paisajes, también en la flora, fauna y patrimonio histórico que aguarda en su interior.