La Ruta de los Molinos, un sendero por el Parque Natural de los Alcornocales

Toma nota para este fin de semana y apunta este interesante sendero que sigue una vía pecuaria, Vereda Patrite-Jimena, que comunica Alcalá de los Gazules con Jimena de la Frontera. Se llama Ruta de los Molinos y discurre a través del Parque Natural de los Alcornocales. Para llegar al sendero hay que tomar la carretera CA-6201 hacia Patrite y al final de esta encontrarás el inicio del sendero.

Tal y como su nombre indica, nos da pistas de lo que encontraremos por el camino. Y es que la abundancia de arroyos de la zona propició un intenso desarrollo de la industria molinera, así que veremos algunos restos de las acequias, muelas y molinos que obligaron a crear los caminos que hoy disfrutamos en la naturaleza. Algunos antiguos molinos como el de Acebuchal, del Nogal y del Olivar, los dejaremos a la derecha antes de comenzar el sendero.

Una vez allí, antes de adentrarnos en el sendero, encontraremos un panel informativo donde se explica el funcionamiento de estos molinos y la señalización de este. El recorrido tiene una duración de entre una y dos horas, dependiendo siempre del tiempo que te tomes para disfrutar del trayecto. Presenta una dificultad baja, sin apenas desnivel y en paralelo al río Rocinejo y al canal que aportaba agua a los molinos. Al encontrarnos en una zona del Parque Natural de los Alcornocales disfrutaremos de un camino sombreado por los acebuches, aunque la sombra no está presente durante todo el trayecto por lo que recomendamos llevar gorra y agua para mantenerse hidratado.

A medida que avancemos, a la derecha del río, encontraremos las ruinas del molino de Castro de Arriba y, más adelante, los del de Castro de Abajo. Otros intereses de esta ruta son los caminos excavados en la roca que deja muestra de la intensa actividad de personas y ganado que hubo años atrás, usando este tramo como paso hacia Jimena.

La Ruta de los Molinos se encuentra en el pulmón verde de la provincia de Cádiz, el Parque de los Alcornocales, por lo que te adentrarás en un paisaje donde la vegetación está muy presente. Además, los tajos rocosos y las lajas de piedra favorecen que sea el hábitat perfecto para numerosas aves, destacando el buitre común o leonado. De hecho, es una de las especies más representativas del Parque Natural de los Alcornocales.