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No hay nada más especial que recorrer las calles de un pueblo o caminar por la naturaleza y finalizar el recorrido contemplando unas maravillosas vistas. A lo largo y ancho de la provincia de Cádiz podrás encontrar lugares increíbles desde los cuales deleitarte con un paisaje inolvidable. Si para este fin de semana no tienes planes, desde Cadizfornia te recomendamos visitar el pueblo de Alcalá del Valle. Así que prepara tu mochila, calzado cómodo y tu cámara de fotos para disfrutar de un fin de semana especial.
Los pueblos de la sierra de Cádiz son perfectos para desconectar de la rutina y dejarse llevar por los encantos más salvajes del corazón verde gaditano. Es el caso de Alcalá del Valle, un pueblo enclavado entre Málaga y Cádiz, donde encontrarás un entorno paisajístico único y unos rincones mágicos con mucho encanto. La localidad conserva todavía reflejos de su origen árabe con sus calles de casas encaladas propias de los Pueblos Blancos de Cádiz. Entre sus grandes intereses podrás encontrar los Dólmenes de los Tomillos, un yacimiento megalítico que cuenta con más de 4.000 años de antigüedad y el convento de Caños Santos, un lugar muy especial de gran valor patrimonial para los vecinos de Alcalá del Valle.
Durante tu visita podrás recorrer estos mágicos lugares, además de descubrir sus bellos rincones y el entorno paisajístico que lo rodea descansando en uno de sus bancos miradores. Desde ellos podrás obtener unas vistas espectaculares de la sierra gaditana y tomarte unas fotografías que no dejarán indiferente a tus seguidores de Instagram.
Estos bancos llevan inscritos el hashtag 'Te quiero' y 'Mi rincón favorito' para que puedas etiquetar la fotografía en tu Instagram a la hora de compartir tus imágenes. Para encontrar ambos bancos miradores, Turismo de Alcalá del Valle ha desarrollado una ruta en su web para que puedas guiarte. Según indica el mapa, el banco 'Te quiero' se encuentra en el camino de la Cuesta, mientras que en el Tajo Melchor está 'Mi rincón favorito'. Ambos miradores se unen al ya conocido 'Rincón del beso' situado en la calle Patín, un lugar que destaca por sus coloridas macetas con flores y que resalta sobre la blanca fachada de este pueblo blanco de la Sierra de Cádiz. Son muchos quienes hacen parada obligatoria en estos lugares para tomar sus mejores fotografías y selfies para llevarse un recuerdo de este encantador pueblo.
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