El parqué
Álvaro Romero
Tono alcista
La temporada de playas ha comenzado en Cádiz y ya son muchos los que están disfrutando de la costa gaditana sin frenos. Pero si hay un lugar especial donde disfrutar de la arena y el mar de una manera diferente es en las calas que se reparten por la costa de Conil. En Roche podrás encontrar rincones de paz resguardadas del viento gracias a sus enormes acantilados. Lo mismo sucede en Conil, en algunas como la cala del Aceite o la cala del Puntalejo, donde su maravilloso paisaje te trasladará a alguna de las idílicas playas del Algarve portugués.
Cuando el viento de levante aprieta se convierte en una odisea ir a la playa, por lo que las calas son siempre la mejor de las opciones. Además, allí las aguas apenas tienen oleaje, son enclaves pequeños y de aguas cristalinas. Cuanto más desconocida, paradisíaca y perdida esté la cala más gusta, así que hoy descubrimos una de las menos conocidas de Roche.
Se trata de la cala El Áspero, una de las que presenta gran encanto no solo por su paisaje, también por el entorno único que la rodea. Esta cala se caracteriza por tener rocas en medio de la arena, por lo que cuando el mar las golpea se producen bonitos saltos de agua. Este enclave es un lugar ideal para relajarse y desconectar del estrés diario.
Para llegar hasta esta recóndita cala, existe un sendero peatonal de madera que te llevará hacia el resto de calas de Roche. De hecho, cuenta con escaleras de bajada y se ha unido Cala Encendida con la de El Áspero. Cuando baja la marea es muy agradable pasear por la orilla y sentir la arena fina y dorada entre los pies. Además, desde este lugar podrás disfrutar de unos fabulosos atardeceres y tomar fotografías impresionantes gracias a su paisaje de rocas, acantilados y mar.
Temas relacionados
También te puede interesar
Lo último
El parqué
Álvaro Romero
Tono alcista
Tribuna Económica
Carmen Pérez
Un bitcoin institucionalizado
La aldaba
Carlos Navarro Antolín
¡Anda, jaleo, jaleo!
No hay comentarios