La calle con más encanto de este municipio de Cádiz es también una de las más fotografiadas

Cuando uno hace turismo es inevitable perderse por los rincones más encantadores de las ciudades o pueblos que visita. En sus calles se oculta la magia de lo cotidiano, las raíces de la historia de un vecindario y la alegría de su gente. Algunas de estas calles llaman la atención por su belleza especial y se convierten en el foco de los objetivos de las cámaras para inmortalizar tu paso por ellas. 

Ejemplo de estas calles las encontramos en pueblos de Cádiz como Setenil de las Bodegas, Arcos de la Frontera, Vejer, Alcalá del Valle, Espera, Barbate y Rota, donde podrás encontrar una romántica ruta que te llevará por algunas calles con encanto gracias los azulejos que decoran sus calles bajo el mensaje ‘Bésame en este rincón’. 

Sin embargo, en el resto de los municipios de Cádiz también se ocultan calles que despiertan el interés del visitante. Es el caso del callejón del Arco, considerada como una de las más singulares de Puerto Real. Esta preciosa calle peatonal está enmarcada por dos arcos de medio punto que datan del siglo XVIII, construidos en piedra ostionera. Además, es un lugar muy apreciado por los vecinos de la villa. Tanto es así que mantienen esta peculiar calle con coloridas macetas de geranios y rosales, convirtiéndolo en una de las estampas más típicas de Puerto Real. 

Datos históricos

Según informaciones de Turismo Puerto Real, su construcción comienza en el año 1718 cuando el solar es entregado a Tomás de Hemosilla, teniente coronel de infantería, quien por entonces ejercía como castellano en una de las principales fortificaciones de las costas de Puerto Real, el Castillo de Santa Cruz de la Matagorda. 

Por aquel entonces no existían construcciones y poco a poco fueron estableciéndose personas vinculadas a la Carrera de Indias que llegaban a la villa atraídas por la reciente instalación en la Bahía de Cádiz de la Casa de la Contratación (1717), propiciando así una rápida expansión urbanística de este espacio en esos años. Poco a poco van construyéndose zonas a su alrededor y va tomando forma de esta pequeña calle de un solo acceso y como un balcón al mar. 

En el año 1798 el Callejón del Arco ya tenía cuatro casas. En el arco que da al mar se situó una lápida en el año 1964 dedicada al poeta apócrifo machadiano José María Torres y a su poema titulado “Mar”, cuyo nacimiento sitúa Antonio Machado en Puerto Real en el año 1838.