Las calles más céntricas de Vejer acogerán un mercadillo de segunda mano y de artesanía

Visitar Vejer de la Frontera siempre es un buen plan. No importa en qué momento decidas descubrir este pueblo de Cádiz que está considerado como uno de los más bonitos de España, ya que siempre tendrá algo con lo que sorprenderte. 

Sus miradores excelentes, su historia, sus callejuelas empinadas rodeadas de casas blancas encaladas, sus patios, gastronomía o su pasado medieval, harán de tu paso por Vejer una experiencia inolvidable. 

Una de las mayores esencias de este pueblo gaditano son sus tiendas de artesanía, que podrás ir descubriendo a medida que paseas por sus pintorescas calles. No hay nada que guste más que pasar un rato agradable haciendo compras, así que, más allá de recorrer las diferentes tiendas con encanto que hay en este pueblo gaditano, este domingo podrás visitar el Rastro de Vejer al aire libre. 

Este mercadillo de segunda mano y de artesanía se celebra los primeros domingos de cada mes de 10:00 a 15:00 horas en las inmediaciones de la calle Juan Relinque, una de las más céntricas de Vejer de la Frontera. Aquí podrás encontrar productos artesanales, antigüedades, cuadros pintados a mano por los propios vendedores, artículos de ocasión y otros objetivos de coleccionismo, entre otros artículos. 

Un pueblo con legado árabe

Declarada Conjunto Histórico, galardonada con el Premio Nacional de Embellecimiento y formando Red de los Pueblos más bonitos de España, Vejer de la Frontera se asienta en una bella colina a cuyos pies discurre el río Barbate. El legado árabe se plasma en su arquitectura popular y en el urbanismo de barrios como el de la Judería. Este pueblo de Cádiz ha sido testigo del paso de diferentes civilizaciones y, amurallada desde siempre, aún conserva la torre del Mayorazgo, San Juan y de la Corredera, así como las puertas de la villa medieval: la del Arco de la Segur, la de la Villa, la de Sancho IV y la Puerta Cerrada. En cuanto al castillo, del siglo XI-XVI, se encuentra situado en la parte más alta del casco antiguo, visiblemente destacado en las vistas panorámicas del pueblo.

Pasear por sus laberínticas calles es hacer un viaje a otro tiempo pasado. Un recorrido en el que te enamorarás de su arquitectura e históricos lugares como la iglesia Parroquial del Divino Salvador, la iglesia de las Monjas Concepcionistas con el Arco de las Monjas, el convento Hospedería de San Francisco y, en las afueras, la ermita visigoda de Nuestra Señora de la Oliva. Otros lugares de interés son el palacio barroco del Marqués de Tamarón y la casa del Mayorazco; y también los molinos de viento Entre sus edificios civiles sobresalen el palacio barroco del Marqués de Tamarón y la casa del Mayorazgo, ambos del s. XVIII, o los molinos de viento del Parque de las Hazas de la Suerte.