La cala de la costa de Cádiz de aguas turquesas y con unas vistas increíbles a África

Para disfrutar del Mediterráneo no hace falta irse muy lejos. En la ciudad más al sur de la provincia de Cádiz (y de Europa), confluyen las aguas del Atlántico y también del Mediterráneo. Para disfrutar de este paraíso celeste tendrás que dirigirte hasta el Campo de Gibraltar, concretamente hasta San Roque donde se encuentra una cala de aguas turquesas que te impresionará.

La Cala Sardina es una playa virgen de San Roque que se suma a la innumerable lista de rincones paradisíacos de esta comarca. También es conocida como playa El Cabrero o Cala Taraje y es la primera playa mediterránea de la provincia de Cádiz y el municipio de San Roque en el límite con la provincia de Málaga (Costa del Sol). Para acceder a ella hay dos opciones: en coche desde la autovía A-7 o a pie desde Torreguadiaro. Además, hay zona de aparcamientos, por lo que encontrar aparcamiento no suele ser un problema.

Una de las razones por las que merece la pena disfrutar de un día de relax en la Cala Sardina es por las increíbles vistas del Peñón de Gibraltar y de África, ya que desde este mágico rincón se puede apreciar en el horizonte el Monte Musa (Marruecos) y Ceuta. Una ubicación inmejorable para disfrutar de estas panorámicas que rodean este maravilloso enclave. Eso sí, su arena es diferente al resto de playas de la costa gaditana, en este caso es oscura del estilo de las playas de la provincia de Málaga.

Así que este verano podrás apuntar esta cala en la lista de destinos a visitar. Además, cuenta con infraestructuras adaptadas para que puedas acceder sin problemas como pasarelas, duchas, papeleras, así como sillas anfibias para personas con discapacidad, etc. Así que si vas disfrutar de un día de playa solo tendrás que preocuparte de respetar su entorno y mantenerla limpia para preservar el encanto de esta maravillosa cala.