El curioso amuleto de la suerte que encontrarás en las playas de Cádiz

Seguramente en algún momento os habréis fijado que los bañistas que pasean por la orilla de la playa, la mayor parte del tiempo, van mirando el suelo. Parece que vayan buscando algo que se les ha caído, e incluso hay quiénes no entienden el por qué no levantan la mirada de la orilla del mar. Esto tiene una explicación que se basa en una teoría popular que se extiende por las playas de Cádiz.

A lo largo de la orilla del mar, en algunos de los enclaves de la costa gaditana como Sancti Petri o Zahara de los Atunes, podrás encontrar a tu paso una gran variedad de piedrecitas, conchas y caracolas que te alegrará la vista a su paso. Pero hay algo que llama la atención de muchos y que no se suele encontrar tan fácilmente. Hablamos de las famosas orejitas de mar o de la suerte, como se le conoce popularmente debido a la forma de oreja que tienen.

Estos pequeños amuletos no son fáciles de encontrar y, es por eso, por lo que se les considera de la suerte. Los afortunados que durante su paseo por la orilla las encuentran suelen guardarla con cariño en la cartera o en algún jarrón de casa para que les de suerte. Debido a su dificultad de encontrarla en la orilla es por lo que se asocia con la buena suerte. Incluso muchas personas se dedican a coleccionarlas y sirven para hacerse joyas con ellas. Ya sea un anillo, colgante o pulsera. De hecho, este año podrás encontrar estos complementos en algunos de los mercadillos de la costa de Cádiz o puedes enviársela a un joyero para que te la personalice en plata u oro.

Pero, ¿de dónde sale este curioso amuleto? Pues la orejita no es otra cosa que el opérculo de un tipo de caracola llamada Astraea rugosa (o Boma rugosa). Es decir, es una especie de tapadera de este molusco que cierra la concha para protegerse de animales y cuando esta especie de puerta se cae las podrás encontrar en la orilla de la playa.

Ahora que ya conoces la existencia de esta especie de amuleto te será inevitable echarle un vistazo a la orilla mientras paseas por la playa para conseguir alguna orejita de la suerte. Con este amuleto podrás trasladarte a los buenos momentos que has pasado en la costa de Cádiz y así podrás sentir el mar un poco más cerca.