El idílico enclave en la sierra de Cádiz donde se celebra Sierrasur Festival

Los días 13 y 14 de octubre tendrá lugar unos de los festivales de música con más encanto de la provincia

La paradisíaca piscina infinita que tiene unas preciosas vistas a la sierra de Cádiz

Los yacimientos arqueológicos que atesora la provincia de Cádiz

Ediciones anteriores de Sierrasur Festival / Paco García Cortés
A.c. Ruiz

05 de octubre 2023 - 06:00

Disfrutar de las maravillas de la naturaleza y de la buena música a la vez es posible en este pueblo de la sierra de Cádiz. En una semana Zahara de la Sierra se convertirá en el escenario perfecto para recibir a numerosos artistas, entre los que se encuentra El Kanka, Raule, Nena Daconte y Elefantes, entre muchos más. Este consagrado ecofestival de la provincia de Cádiz inició su andadura en 2016 y en la actualidad sigue siendo uno de los imprescindibles del otoño gaditano.

Cada vez son más las familias que eligen este festival para disfrutar de la música, aunque también cuenta con un público joven a los que les apasiona el entorno en el que se ubica. Sierrasur Festival se celebra los días 13 y 14 de octubre en el área recreativa de Arroyomolinos de Zahara de la Sierra, un lugar único en el corazón de la sierra gaditana que durante los meses de verano se convierte en uno de los rincones más especiales para refrescarse.

Además, como sucede en cada edición, la apuesta musical se combina con un escenario que es un paraíso natural. Rodeado de una extensa vegetación se celebran múltiples actividades programadas como talleres de manualidades, pinturas, reciclaje, tirolinas, juegos acuáticos, deporte y tantas cosas más, hacen que cada año más familias y amigos decidan pasar aquí un fin de semana inolvidable.

El festival se encuentra en el Área Recreativa de Arroyomolinos, ubicada justo a los pies de la sierra de Monte Prieto, a sólo unos 300 metros de la Cueva del Susto, besando las orillas del pantano de Zahara, en pleno Parque Natural Sierra de Grazalema. Cuenta con una superficie de 63.362 m2, un espacio muy amplio entre huertas y árboles frutales donde se ha aprovechado el curso del río para crear una pequeña playa artificial de la que se puede disfrutar en verano. Además, el festival completa el recinto para que las familias puedan disfrutar de otras actividades más allá de la música, así como disponer de servicios médicos, puntos de comida y una ampliación de servicios de baños.

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