Siete planes para conocer Conil este verano

Conil es uno de los destinos preferidos para los viajeros que llegan a Cádiz cada verano. Aunque la mayoría de los visitantes que aterrizan en estas latitudes cada año lo hacen atraídos por sus inmensas playas de arena blanca, Conil tiene mucho más con lo que embaucar al turista. Su patrimonio histórico es muy extenso, incluyendo obras como la Iglesia de Santa Catalina de Alejandría, la Torre de Guzmán, las Torres Almenaras de la Costa o la Ermita del Espíritu Santo. A todo esto hay que sumar su amplia oferta gastronómica y su dedicación al atún, el cual tiene hasta un museo. Vamos a indicarte las cosas imprescindibles para descubrir el auténtico Conil.

Degustar atún rojo de almadraba

El atún rojo de almadraba es el rey de todos los platos de la zona, exquisito y de gran calidad. Este pescado capturado de manera artesanal en la costa de Cádiz es una delicatesen que saben preparar en Conil como en ningún otro sitio. El pueblo acoge una ruta gastronómica del atún desde hace ya dos décadas, así que no olvides probarlo en sus múltiples recetas tradicionales o las más innovadoras: solomillos de atún con aceite de algas, tartar, atún encebollado…

Ver el atardecer en las calas de Roche

Las Calas de Roche se encuentran entre el puerto de Conil y la urbanización de Roche, donde una serie de pequeñas calitas rocosas se esconden bajo los acantilados de color rojizo. En algunas el acceso es complicado, pero merece la pena disfrutar de uno de los atardeceres más bonitos de la zona. Si te gusta hacer nudismo ésta es tu playa.

Perderse por el centro histórico

Un buen plan de verano es pasear por sus calles para saborear su centro histórico típicamente marinero. Casas blancas, estrechas calles encaladas y engalanadas por buganvillas, geranios y claveles, sus patios y un recorrido por su historia donde se respira su pasado musulmán. No te pierdas la Iglesia de Sata Cantalina, La Torre de Guzmán o la puerta de Cádiz.

Disfrutar de sus playas

El litoral de Conil es único debido a la ausencia de edificaciones, su orografía ha permitido que las playas se hayan conservado prácticamente vírgenes y salvajes. El océano Atlántico ha moldeado extensas playas de arena tostada, acantilados que esconden pequeñas calitas y donde la naturaleza se hunden en el mar. No puedes irte de Conil sin haber disfrutado de un paseo por la playa de La Fontanilla, un chapuzón en Los Bateles, haber nadado en las aguas de la Cala del Aceite y Fuente del Gallo o haberte resguardado de la mirada de todos en la recónditas calas de Roche.

Visitar el Mercado de Abastos

Situado en la calle Rosa de los Vientos, el mercado de abastos de Conil es el lugar perfecto para comprar sus productos gastronómicos típicos al mejor precio y siempre frescos: atún, embutidos, frutas, carne, pescado y por supuesto los alcauciles de Conil (una de sus verduras estrella).

Ruta a caballo

Conil de la Frontera ofrece muchas opciones para todos los gustos, una buena idea podría ser combinarlas si no tienes tiempo para hacerlas todas. Por ejemplo podrías ver atardecer en la playa a lomos de un caballo. Existen centros hípicos que ofertan estas rutas a lo largo del litoral conileño.

Visitar el Faro de Trafalgar

No podemos menos que recomendarte que si tienes la oportunidad, visites sin falta el Cabo de Trafalgar, y si puedes hacerlo al atardecer mejor que mejor pues disfrutarás de una de las puestas de sol más espectaculares de toda Andalucía, todo un espectáculo, pues desde las dunas hasta la torre cónica de la atalaya, pasando por los pinares se engalanan de brillantes tonos anaranjados que crean una espectacular atmósfera de magia.