La trágica leyenda a lo Romeo y Julieta que se esconde en este pueblo de Cádiz
Desde el balcón de los amorosos podrás disfrutar de unas increíbles vistas
Qué ver en Castellar de la Frontera, un pueblo de Cádiz de cuento
La felicidad se hornea en esta pastelería de uno de los pueblos más bonitos de Cádiz
Existen lugares con gran encanto, no solo por su ubicación, el diseño o las vistas que puedes contemplar desde este punto, también por las historias que se esconden en ellos. Si algo gusta al visitante es conocer el bagaje histórico, cultural o artístico que atesora el lugar que va a visitar. De esta manera, podrá disfrutar plenamente de estos enclaves más allá de una simple visita.
En esta ocasión nos trasladamos hasta un pueblo que se ubica en el Campo de Gibraltar, Castellar de la Frontera. Este pueblo de Cádiz está considerado como uno de los más bonitos de España y despierta el interés del visitante al estar enclavado en el corazón de una fortaleza histórica. En su entramado podrás descubrir rincones muy especiales, pero nos fijamos en uno de ellos.
Se trata del balcón de los amorosos, un mágico rincón que se ha convertido en el símbolo de este municipio ya que, además de contar con unas impresionantes vistas también gira en torno a él una leyenda a lo Romeo y Julieta. Según informa Vivir el Sur, fue el escenario de un juramento de amor eterno que acabó con la muerte de ambos enamorados.
Siguiendo con estas mismas informaciones, versa sobre él la leyenda de que un joven de Los Barrios subía las noches de luna llena a Castellar para contemplar su belleza y disfrutar del reflejo que proyectaba en el río Guadarranque; y fue allí donde conoció a la hija del Emir. Entre ellos surgió el amor a primera vista y cada noche de luna llena se reencontraban, alimentando así un amor prohibido entre ambos.
El padre de la joven, en contra de este amor, fue quien acabó con la vida del joven atravesándolo con una daga. Fue tanto el dolor por esta pérdida, que la joven no pudo soportarlo y acabó quitándose la vida días más tarde en el balcón donde cada luna llena se profesaban amor eterno. Ahora que ya conoces esta apasionante leyenda podrás visitarlo, ya que es de acceso público.
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