Las cinco rutas más curiosas de Cádiz

Antes de que comiencen las altas temperaturas propias del verano podrás aprovechar para disfrutar de los diferentes senderos que podrás encontrar por la provincia de Cádiz. Mayo es un mes ideal para adentrarte en la naturaleza y disfrutar de la belleza del entorno donde abunda una extensa vegetación, un paisaje de montañas y unas vistas impresionantes. Desde Cadizfornia te recomendamos algunas rutas curiosas para que conozcas las maravillas de la provincia de Cádiz desde otra perspectiva.

Ruta del Buda

Si existe un sendero peculiar en la provincia gaditana es este que se encuentra en Tarifa conocido como la ruta del Buda. Se trata de un sendero mágico que se encuentra en el Parque Natural del Estrecho y que discurre por la sierra de Enmedio, entre la de Bartolomé y la de Ojén. Cuenta con un tramo de ida y vuelta de 8 kilómetros que coincide con el sendero de La Peña, que atesora un mirador; mientras que el otro tramo presenta una ruta circular de 9,5 kilómetros.

El principal atractivo de esta ruta, además de sus impresionantes vistas hacia la costa africana y playas como la de Valdevaqueros, es la cueva colorida que encontrarás en el camino decorada con figuras y elementos que hacen de este lugar un pequeño santuario budista en la naturaleza. El inicio del sendero comienza en el kilómetro 77 de la carretera N-340, la que une Algeciras con Tarifa y Cádiz, en el punto de información del Parque Natural del Estrecho. Tendrás que desviarte a la derecha, pasando el camping de la Peña para comenzar la subida al sendero.

La Montera del Torero

En Los Barrios podrás encontrar otra de las rutas más curiosas de Cádiz cuyo principal atractivo es la impresionante formación rocosa que encontrarás en este entorno. Esta peculiar estructura ha ido sufriendo un proceso de erosión a lo largo del tiempo, dando como resultado la forma típica de montera. La ruta en cuestión comienza en el área recreativa la Montera del Torero, tiene una distancia de unos 1,7 km y pertenece a un tramo a un tramo del Corredor Verde Dos Bahías. Uno de los principales intereses es que la propia montera sirve de techo a una cueva natural en la que se perciben los efectos erosivos. Según informa Guía de Cádiz, se sitúa junto a unas crestas rocosas conocidas como Tajo de los Príncipes, donde en algunos lugares hay excavadas tumbas antropomorfas.

La Silla del Papa

En Tarifa encontramos otro peculiar sendero que te llevará hasta el lugar más elevado de la sierra de la Plata, donde se sitúa el pico de la Plata o la silla del Papa que cuenta con 458 metros de altura. En este sendero podrás observar el yacimiento de la silla del Papa y unas impresionantes vistas a la ensenada de Bolonia y la el continente africano de fondo. Para llegar hasta aquí tendrás que dirigirte a la N-340, a la altura del km 71 y tomar la CA-8202 a Bolonia.

Ruta de los Flysch

Si eres un enamorado del geoturismo no puedes perderte las maravillas que se encuentran en la costa de Algeciras. Se trata de los flysch del Estrecho de Gibraltar, una sucesión de estratos formados por rocas más duras y arcillas más blandas que se han ido sedimentando durante millones de años en el fondo del mar. Cuando la marea está baja se pueden apreciar las formaciones rocosas que se encuentran en la zona de manera vertical. Los flysch del Estrecho de Gibraltar son uno de los fenómenos costeros más impresionantes de la provincia de Cádiz y se pueden descubrir a través de un sendero de 2,6 km señalizado entre Punta Carnero y Getares. De igual manera, podrás descubrir los flysch iniciando el recorrido desde el Parque del Centenario.

El Salto del Cabrero

Destacamos esta ruta de Benaocaz como una de las más curiosas por las condiciones que presenta el terreno y por el entorno natural por el que discurre. La ruta del Salto del Cabrero se encuentra en Grazalema y Benaocaz, pero para iniciar el recorrido aconsejamos hacerlo desde la calle Pajaruco en Benaocaz. A lo largo del recorrido podrá acompañarte alguna que otra cabra y, también te impresionará el inmenso paisaje plagado de grandes rocas y un desfiladero. Una de las principales razones por las que hacer este sendero y lo que nos transmite curiosidad, es porque en esta zona, al final del trayecto, habitan los buitres leonados. Podrás contemplar numerosas aves rapaces, pero, sobre todo, podrás ver las colonias de buitres leonados sobrevolando las impresionantes paredes rocosas y los acantilados. La subida merecerá la pena ya que te encontrarás en un lugar único para disfrutar de tal espectáculo. Tiene una dificultad media y hay que extremar la precaución durante los tramos rocosos.