Qué ver en Alcalá del Valle, el pueblo de Cádiz que tiene una joya arqueológica y que brilla por su gastronomía

La ruta de los Pueblos Blancos de Cádiz nunca deja de sorprender al visitante. Su arquitectura de casas blancas y rodeados de naturaleza, son algunas de las características comunes que comparten algunos de ellos. Grazalema, Setenil de las Bodegas, Bornos o Arcos de la Frontera, son algunos de los más atractivos para disfrutar de una escapada rural, pero no los únicos. Enclavado entre un valle entre Málaga, Cádiz y Sevilla, descubrirás uno de los pueblos gaditanos de origen árabe.

Esta joya de la provincia gaditana se compone de un entramado urbano de casas encaladas, calles estrechas y empedradas que cuentan con un paisaje de campiñas a su alrededor. Su arquitectura popular ofrece un claro testimonio de su origen árabe, siendo la villa fundada en el siglo XV por los musulmanes que vivían en Setenil de las Bodegas, su pueblo vecino. Sin embargo, según informaciones de Turismo de Andalucía, el conjunto de dólmenes localizados en la Dehesa del Tomillo apunta que esta zona fue poblada en la época prehistórica, aunque su historia conocida se inicia en 1488. Fue en este año cuando los Reyes Católicos autorizaron el asentamiento en este lugar a 25 musulmanes con sus familias; éstas pertenecí­an a Setenil y al lugar se le llamó Alcalá de Setenil.

Alcalá del Valle está situado en el extremo nororienal de la provincia de Cádiz, en un paisaje de campiña, de tierras cultivadas por cereal y olivos. Este pueblo gaditano se estructura en torno a la iglesia, con un trazado urbano en el que destacan la iglesia de Santa María del Valle y el convento de Caños Santos. Siguiendo con estas mismas informaciones cabe señalar que este pueblo de Cádiz tuvo varios nombres antes de estipularse su denominación actual, pasando por nombres como Alcalá de Ronda y Alcalá de la Vega.

Su joya arqueológica son los Dólmenes de los Tomillos, un conjunto megalítico con un menhir único en la provincia, encajados en un hermoso paraje natural. Este yacimiento tiene más de 4.000 años de antigüedad y se encuentra cerca del Arroyo del Cerezo. Es uno de los atractivos de este pueblo gaditano, ya que estos dólmenes son recintos funerarios que se pueden visitar en mitad del campo. Estos sepulcros representan galerías cubiertas, megalitos poligonales y tumbas mixtas. Fueron excavados en 1938 por el Museo Provincial de Cádiz y representan una gran importancia histórica ya que se conforma de enterramientos del Período Calcolítico, anterior al 2.000 a.C., en el comienzo de la Edad de los Metales.

Para disfrutar de las vistas a Alcalá del Valle podrás hacer una ruta por sus bancos miradores: 'Mi Rincón Favorito' y 'Te quiero'. Desde estos estratégicos lugares disfrutarás de unas vistas maravillosas de este pueblo gaditano y podrás completarlo con el Rincón del Beso que se encuentra en la calle Patín, donde las coloridas macetas de colores sobre la blanca fachada de sus casas te cautivará al instante.

Destacan también entre sus monumentos, la iglesia de Santa María del Valle, el cortijo de la Cacería (s. XVI) con apariencia de palacio y la ermita del Cristo de la Misericordia. Pero los atractivos de Alcalá del Valle no acaban aquí, la gastronomía es también una de las razones por las que debes visitar este pueblo, ya que aquí se encuentra Mesón Sabor Andaluz, el primer restaurante estrella Michelin de la Sierra de Cádiz, siendo uno de los que más brilla en el firmamento de las estrellas en la provincia gaditana.