Cambio de estilo bajo los pies del Cautivo

La Cofradía de Jesús Cautivo y Rescatado (Vulgo Medinaceli) y María Santísima de los Dolores (V.O.T.) protagonizó en la tarde noche de ayer una destacada y especial salida procesional, un desfile marcado, sobre todo, por el estreno del nuevo paso del Cristo.

Esta novedad fue la más destacada de cuantas presentaba la hermandad, pudiéndose considerar incluso como el estreno más importante de cuantos se presentan este año en la Semana Mayor chiclanera.

No en vano, el nuevo paso del Medinaceli viene a sustituir al antiguo portador del Cristo, unas andas que han procesionado por la ciudad durante casi medio siglo de historia.

De esta forma, minutos después de que a las ocho de la tarde se abrieran las puertas del primer templo de la ciudad, la Iglesia Mayor Parroquial de San Juan Bautista, y tras la salida de las secciones de penitentes del Cristo, asomó por vez primera bajo el dintel del portón en la Semana Santa de Chiclana el nuevo paso del Medinaceli con el Cristo Moreno sobre su monte.

Y con este estreno un cambio total de estilo, para pasar del tradicional paso plateado, que había pertenecido anteriormente a la hermandad del Nazareno del Amor de Cádiz, a un imponente paso en madera en su primera fase de ejecución, unas andas que inician así un largo proceso de elaboración.

Cabe destacar, no obstante, que en esta su primera salida procesional el paso no ha podido lucir completo, ya que el tallista encargado del proyecto, el escultor alicantino Domingo García Chahuan, no ha concluido los candelabros guardabrisas a tiempo, con el consiguiente contratiempo para la cofradía chiclanera, ajena totalmente a los motivos de dicho incumplimiento. Por ello, y gracias a la colaboración del grupo parroquial Cristo del Amor y al párroco de San Antonio, el padre José Manuel Daza, el paso lució durante el desfile de ayer los candelabros del paso del Amor.

Exornado con iris morados, el paso portó así por vez primera al Cristo de Medinaceli por unas calles repletas de fieles, como viene siendo tradición cada Miércoles Santo en Chiclana.

Y tras él, el acompañamiento musical a cargo de la Banda de Cornetas y Tambores Fundación Zoilo Ruiz Mateos, de Rota. Precisamente ayer, la citada banda estrenó una marcha compuesta para el Medinaceli, 'En Cuerpo y Alma', que interpretó a su salida.

Tras el Cristo, las interminables filas de devotos en penitencia volvieron a hacer del cortejo del Miércoles Santo el más concurrido de cuantos procesionan en Chiclana.

Y bajo el palio de María Santísima de los Dolores, la titilar mariana de la cofradía recorrió el itinerario también arropada por miles de chiclaneros, portada, como el Cristo, por los costaleros de la Peña La Ilusión. La Banda Municipal Maestro Enrique Montero cumplió un año más con su cita tras el palio Servita.